¡No me regales libros!
Un niño iba a celebrar
su once cumpleaños y le pidió a su madrina: “por favor, no me regales libros”.
Cuando era más pequeño ese niño amaba los libros de cuentos infantiles leídos
por un adulto, y cuando él aprendió a leer le gustaba narrar esos cuentos a los
demás y ponerles su propia voz. Ahora la realidad es otra: la tela de araña
tejida por las múltiples pantallas que le rodean (TV, videojuegos,…) atrapan su
tiempo de ocio y la lectura de libros ha quedado relegada a un segundo plano.
El acto de la lectura silenciosa o en voz alta nos acerca
a las experiencias de otros y nos trasporta a mundos, reales o ficticios, que
jamás podremos visitar. Cuando con veinte y tantos años decidí leer la trilogía
de “El Señor de los Anillos”, el escenario creado por Tolkien me atrapó;
durante semanas el autor me trasladó a la Tierra Media
La lectura, la comunicación con los autores a través de
sus obras, es una vía que puede constituir, en sí misma, un revulsivo para
iniciar nuestra "revolución
personal" y remozar la práctica profesional. Es obvio que no todos los
libros que "caen en nuestras manos", suscitan el debate o diálogo con
nuestros esquemas de pensamiento. Pero algunos nos sacan del letargo que
produce la lectura de textos más o menos convencionales. Un ejemplo es el libro
de Pennac (1993: 57) Como una novela.
Este profesor francés trataba de seducir al alumnado hacia la lectura, pero sin
utilizar el imperativo pedagógico “tienes que leer”. En su obra el autor
señala:
"Cada
lectura es un acto de resistencia. ¿De resistencia a qué? A todas las
contingencias. Todas: sociales, profesionales, psicológicas, afectivas (...).
Una lectura bien llevada salva de todo, incluido de uno mismo".
Creo que después de la lectura de este fragmento es
bastante probable que nos paremos a pensar y reflexionemos, de manera no rutinaria,
sobre cómo abordamos nuestra lectura y cómo se aborda en los contextos
escolares. Y lo que es más importante, nos daremos cuenta que la lectura de ciertos libros nos ha
"salvado" de muchas cosas: de la ignorancia, de la soledad, de
nosotros mismos, de planteamientos vitales o profesionales incorrectos...
Estoy de acuerdo contigo, Lidia. La lectura de los libros es una de las piezas clave para la adquisición de conocimiento en todas las edades. Los libros siempre han sido el vehículo al aprendizaje durante generaciones. A través de los libros hemos aprendido, soñado y viajado a otros mundos. Leer nos despierta la mente y contribuye a la estimulación de nuestra creatividad e imaginación, por lo tanto es fundamental inculcar a nuestros alumnos la importancia de incluir la literatura en nuestro día a día. Citando a Witman, añado que "las palabras y la poesía SÍ pueden cambiar el mundo".
ResponderEliminarConcluyo esta aportación diciendo que, por mucho que la sociedad actual quiera digitalizarlo todo, los libros son irreemplazables sin lugar a dudas.
Lidia González Cabello.
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ResponderEliminarDespués de haber leído este post, me posiciono en el mismo lugar que la autora. Creo que lo que dice Lidia es indiscutible. Los libros nos ayudan a pensar, conocer, creer y crear. Son un punto de partida para el desarrollo de muchísimas habilidades, como la imaginación, la inteligencia cultural o la capacidad de abstracción. Debemos tener en cuenta ese aspecto al que también hace referencia Lidia, la introducción de las tecnologías en nuestras vidas. No podemos negar que nuestras vidas giran en torno a aparatos electrónicos y que desarrollamos muchísimas tareas a través de la digitalización que habíamos desarrollado siempre de forma tradicional. Aquí podemos hablar de los libros digitales o e-book. Son una forma nueva forma de leer que se ha creado a raíz de esta digitalización.
ResponderEliminarPersonalmente, prefiero realizar lecturas con libros físicos, pero debemos tener en cuenta que estas lecturas también han podido transportarse a una pantalla y que hay gente que disfruta de una historia de la misma forma que lo puede hacer una persona leyendo un libro físico. Desde la escuela y la orientación debemos aunar recursos y fuerzas para fomentar el gusto por la lectura, en el formato que sea, es decir, hay que buscar el lado positivo de la tecnología, y si el niño/a quiere hacer uso de un aparato digital, que haga un uso correcto. Invitar a las personas a leer y a crecer con los libros, con historias narradas por otros, ayudando a abrir fronteras y conocer mundos que por si solos nunca podrían imaginar, es un punto clave y un reto que debemos aceptar desde el amito académico y formador.
Miriam González González.
Coincido con la frase "Durante largas horas abandoné mi mundo... su mundo era mi mundo durante un tiempo." La lectura no solo se utiliza para fomentar el conocimiento, alguna vez novedoso, en las nuevas generaciones, sino que, también, considero que dentro de la escritura de cada autor y autora encontramos su plena personalidad, el mundo generado en cada lectura es el reflejo del pensaminto de cada autor/a.
ResponderEliminarAlgunas historias están llenas de detalles que ayudan al lector o la lectora a imaginarse qué es lo que está ocurriendo, otras, permiten a este/a desarrollar su creatividad y plantear una segunda perspectiva de la apariencia y los sucesos de la propia historia; algunas comienzan con un "érase una vez...", y otras, como ocurre en el caso de "Crónica de una muerte anunciada", del célebre autor, Gabriel García Márquez, nos desvelan el final desde un principio, y van deshilvanando todos los eventos que han llevado al final de la vida de un personaje.
Para finalizar, el precioso acto de la lectura ha sufrido un cambio notable en los últimos años. Es cierto que siguen usando libros, sin embargo, me gustaría aportar la utilidad de los audiolibros para aquellas personas que encuentran dificultad en sentarse durante mucho tiempo a leer. No empleo este método, no obstante, me impresiona positivamente el que esta manera de acercamiento a la lectura haya otorgado una respuesta a la inquietud, además de a la falta de motivación para la lectura y del tiempo para ello.
Apsara Wadhwani Ramírez
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ResponderEliminarTras leer el post, estoy de acuerdo con la autora, Lidia. La lectura de los libros enriquece la cultura, mejora el lenguaje, desarrolla la capacidad de concentración y la memoria, estimula la imaginación, entre otras. Esto no ocurre solo en edades pequeñas sino que ocurre en todas las edades. Leer nos despierta la mente, por lo que es importante fomentar la literatura en nuestros alumnos. No podemos negarnos a el uso de las tecnologías, ya que es algo que se va a presentar en nuestro día a día, sin embargo podemos utilizar millones de recursos para fomentar la lectura a través de ella.
ResponderEliminarEn mi opinión, una pantalla de ordenador o un móvil no remplazará nunca el olor de un libro, pero debemos buscar diferentes opciones para poder fomentar la lectura en todos los alumnos.
“La lectura adelanta el tiempo de la vida y paradójicamente, aleja el de la muerte. Leer es buscar otras realidades para comprender mejor esta realidad”- Fabricio Caivano (1942)
Noemí Rosquete Lorenzo.
Estoy de acuerdo con las personas que han compartido sus opiniones y solo me queda aportar indicando que un libro también es un gran amigo.
ResponderEliminarDebemos inculcar desde pequeños el gusto por la lectura e irlo fomentando a lo largo de la vida.
Soy Jessica Amador
EliminarEs un tema muy interesante, puesto que la lectura se a tratado en la escuela tradicionalmente como una obligación. Durante mis años de instituto a mi me suponía un suplicio tener que leer esas obras que la docente de Lengua y Literatura nos mandaba, lo que hacía que, a mi y a muchos de mis compañeros, la idea de leer obras literarias nos pareciera de todo menos atractiva. Sin embargo, creo que en los últimos años este concepto ha ido cambiando, debido a que se trabaja el gusto por la lectura poniendo al alcance de los alumnos diferentes obras literarias para todos los gustos desde edades tan tempranas como las que se reúnen en Ed. Infantil.
ResponderEliminarMucho tiempo ha pasado ya desde que odiaba leer y es justo ahora cuando más me he aficionado. La lectura nos salva en momentos determinados, para mi particularmente supuso una vía de escape para el momento tan complicado que hemos pasado este año. Durante el confinamiento fueron mis amigos y me llevaron a lugares donde preferiría haber estado.
Luego de leer este post, puedo afirmar las diferentes ideas que se tratan en él. Al igual que le pasa a este niño de once años, muchos jóvenes actualmente, debido a la aparición de las tecnologías, tienen el tiempo de ocio atrapado y se encuentran inmersos en ellas, por lo que, el espacio de la lectura ha pasado a un segundo o tercer plano.
ResponderEliminarEn segundo lugar, es de vital importancia que, los libros forman parte de nuestro día a día, quedando reflejado la cultura y la sociedad en la que cada libro se encuentra inmersa. También, como bien dice Lidia, los libros nos han salvado de la ignorancia, la soledad, de planteamientos vitales… por lo que, tenemos que entender que los libros han sido y son una fuente muy importante en nuestra vida tanto personal como académica.
Finalmente, un aspecto muy importante que hay que tener en cuenta resulta ser la aparición de las tecnologías en nuestra sociedad. Cada día es mayor el uso que se le dan a las tecnologías por lo que, es importante seguir manteniendo la utilidad de los libros en nuestro día a día. Es importante que, ambas herramientas se complementen entre sí, ya que podemos encontrar una variedad de personas que prefiere realizar una lectura de un libro o artículo a través de una pantalla, o los conocidos como e-book.
Daniel J. Cabrera Hernández
Estoy totalmente de acuerdo con el post. La importancia de la lectura de los libros ha ido desapareciendo a medida que las nuevas tecnologías se han abierto paso, aunque todavía existe una minoría de personas que se inmersan en el mundo del lector. En mi caso, cuando era adolescente, leía muchos libros, con entusiasmo, me imaginaba las historias...pero a medida que he ido creciendo y por la falta de tiempo, he ido perdiendo ese "enganche" continuo a un libro. Se debería inculcar la importancia de leer desde edades tempranas, ya que, desde infantil, los niños y niñas viven con un entusiasmo diario por explorar, saber, investigar, son "esponjas" de conocimiento, etc. Además, mejora la comprensión, incluso la creatividad e imaginación.
ResponderEliminarMarta Concepción Concepción.
Hola Lidia. Me ha resultado un post muy interesante.
ResponderEliminarComo aficionada a la lectura siempre me ha parecido que la forma en la que se fomenta esta actividad desde los centros escolares no es del todo adecuada. Muchas veces nos plantean libros que no tienen nada que ver con nuestra realidad o con nuestros gustos, hecho que hace que no llamen nuestra atención y que lleguemos a pensar que la lectura no es para nosotros. No obstante, si tenemos la suerte de que de una forma u otra un libro como dice usted nos atrape, podremos trasladarnos a otros mundos y vivir experiencias maravillosas.
Por ello, considero que es sumamente importante un adecudado fomento de la lectura para lograr que no se den situaciones como las que se ejemplifican en el post.
Un saludo, Mixell González.
“Quien dice que leer es aburrido es por que no ha encontrado el libro indicado.”
ResponderEliminarJ. Rowling
Siguiendo la línea de mis compañeros/as, tal y como escribe Steven Pinker leer nos permite acceder a “mundos que sólo pueden ser vistos a través de los ojos de un extranjero, de un explorador o de un historiador”. La lectura nos educa, nos relaja, nos ayuda a la hora de escribir, etc. Un libro nos hace encender la imaginación, ya que nosotros/as mismos/as idealizamos a los personajes, los lugares, etc. Es por ello, que cuando se realiza una película basada en un libro, ésta suele estar muy por debajo de nuestras expectativas, ya que nuestra imaginación es superior a ello, pues leer nos da alas a la inspiración.
Del mismo modo, con respecto a la frase con la que he comenzado este texto, pienso que deberían de cambiar mucho la técnica que se lleva a cabo en el ámbito escolar hacia la lectura, ya que, muchos/as docentes obligan a sus alumnos/as a leer ciertas obras literarias sin escuchar la opinión del alumnado, ni teniendo en cuenta sus gustos, generando así, el odio por la lectura. Sin embargo, otra metodología, seria que éstos/as eligiesen los libros que quieren leer, y tras ello, darle la alternativa de exponer el porqué le ha gustado o no dicho libro/cuento que ha escogido, con el fin de que todos y todas encuentren el género literario que más se adapta a ellos/as y que más agradable les resulta.
Bien es cierto, que hoy en día existen las nuevas tecnologías, los docente y familiares debemos introducirnos en ella, pues nosotros somos los que debemos enseñar a los/as más pequeños/as como hacer buen uso de las TICs. En este caso, podríamos darle la opción de que escojan un libro de e-book, pues al fin y al cabo están leyendo pero con otro medio, y puede que hasta a muchos/as les resulte más atractivo y sencillo. Por el contrario, hay muchos/as que prefieren el libro físico porque el efecto de escuchar el sonido de pasar la página les encanta.
Tal y como día Miguel de Cervantes, “El que lee mucho y anda mucho, ve mucho y sabe mucho”.
Atteneri del Carmen, Mozón Rodríguez.
¿Se debe obligar a leer? Yo creo que no. Descubrí mi afición a la lectura a los dieciséis años, y a los veintidós, me sigue encantando. Desde pequeña, siempre escuché la siguiente frase: "anda, coge un libro y siéntate a leer". Desde mi punto de vista, al realizar este acto, lo estás convirtiendo en un proceso rutinario, obligado y monótono, del que gran parte de la sociedad huye. Es por ello, que considero que la lectura debe ser un hecho voluntario, que te apetezca coger un libro y evadirte a otros mundos y con otros compañeros de viaje, sin importar el tiempo trascurrido.
ResponderEliminarAsimismo, creo que se debe empezar a leer sobre temas que te gusten, aficionen o te atraigan. Por ejemplo, durante mi Prácticum II de Educación Infantil, una docente que impartía clases en el aula de 3 años, promovía la lectura, animando a su alumnado, a traer al aula, un libro que ellos quisieran leer, y así compartir nuevas aventuras, todos los días, con sus compañeros. Y resultaba fascinante observar como esos niños, aunque no supieran leer, contaban la historia emocionados y felices, aunque también inventaran gran parte de ella. ¡Bendita imaginación!
Por otro lado, sigo en Twitter a un docente joven, Cristian Clivé, que imparte clases en secundaria y bachillerato, que promueve la lectura y el temario de Lengua Castellana, haciendo fusión con las redes sociales, o diversos juegos de moda. Por ejemplo, con obras clásicas, como "La casa de Bernarda Alba", les pide que se lo lean, y creen un perfil de Instagram, donde deberán subir historias y fotos, como si fueran ellos los protagonistas, siguiendo el hilo de la historia. Con estas actividades se motiva al alumnado, y se promueve la lectura, de una manera más dinámica y divertida, desde mi punto de vista, y por consecuencia, la cultura.
En conclusión, considero que se debería de buscar alternativas para promover la lectura, y no mediante la imposición, y predicar con el ejemplo, ya que, si un niño ve a sus adultos cercanos leyendo, lo más probable, es que, en la mayoría de los casos, adopte ese hábito o no lo vea como una obligación. Sin embargo, si todo el día los adultos de su entorno están centrados en dispositivos electrónicos, pues los niños tienes más probabilidades de realizar la misma acción. No obstante, también se puede llevar a cabo una fusión como realizaba el docente anteriormente citado, o leer a través de e-books, una alternativa igual de válida, todo depende del consumidor.
Dayda Tejera González
Tras haber leído el post, estoy totalmente de acuerdo con Lidia. Los libros han sido y serán, indiscutiblemente, la herramienta más poderosa para desarrollar la imaginación, a nivel de todas las edades. Tienen la capacidad de transportarte a mundos inimaginables, introduciéndote en sus entrañas. Considero que actualmente, los niños están muy metidos en las nuevas tecnologías y es muy común que por la calle nos encontremos a niños en los carrito con los móviles de los progenitores o con tablets, puesto que también son una fuente de distracción para ellos y un alivio para los progenitores, que estén distraídos. Sin embargo, bajo mi punto de vista, no le están haciendo ningún favor al desarrollo integral de sus hijos e hijas.
ResponderEliminarLos libros deberían perdurar hasta la eternidad. Así mismo, se debería de promover la lectura en todos los cursos educativos, puesto que en Educación Infantil el alumnado se encuentra entusiasmado con la lectura de libros/cuentos, pero en el paso a Educación Primaria, esa motivación y esas ganas se desvanecen. Y es ahí donde se debería actuar, para que no se pierdan esas ganas de leer.
Noelia Valencia Fandiño
Tras haber leído este post, estoy totalmente de acuerdo con la autora. Los libros y las lecturas siempre nos servirán de utilidad para desarrollar nuestros pensamientos, la creatividad, la imaginación seas niño o adulto. Cada vez son más las personas que ven la lectura de un libro como algo pesado o cansino, es decir, que prefieren dedicar todo su tiempo en otra cosa que les sea de utilidad antes que leyendo. Sin embargo, muchos se olvidan lo mucho que ayuda una lectura, ya que se aprende cultura y, se puede llegar a disfrutar con un libro si lo eliges bien.
ResponderEliminarAsimismo, me gustaría mencionar que, en mi época de colegio e instituto es cierto que nos "obligaban" a realizar 12 lecturas a lo largo del curso, por lo que no lo hacíamos realmente para disfrutar de la lectura, sino porque si queríamos aprobar, teníamos que leer. A medida que pasan los años muchos y muchas compañeros y compañeras han abandonado la lectura porque no tienen tiempo o simplemente consideran que no les aporta beneficios.
Sin embargo, para mí, con el paso de los años me he vuelto una adicta a la lectura y siempre que tengo un poco de tiempo libre disfruto de un buen libro. Si bien es cierto que cada vez son más las tecnologías que permiten leer un libro o incluso escuchar la lectura, pero estoy de acuerdo con la autora y compañeros/as que ha comentado el post, que un libro siempre va a ser insustituible y, desde el papel como profesionales de la educación es importante inculcar el valor de la lectura como algo que nos aportará y beneficiará y no como una "obligación".
Andrea Afonso Rodríguez
Reflexionando sobre el post, me he dado cuenta de que todas las personas hacemos algo para encontrarnos mejor, algunos/as acuden al gimnasio para verse físicamente bien, otros/as prefieren ver miles de vídeos en plataformas digitales para aprender a realizar manualidades... pero si nos paramos a pensar hoy en día, ¿quién lee?
ResponderEliminarA mi parecer, el hábito o "hobbie" de leer no solo para cultivar la mente sino para evadirnos de lo que nos rodea por un instante, para seguir teniendo esperanza en algo o incluso para fomentar esa creatividad que algún día desarrollamos durante la infancia, se está perdiendo. El porqué de ello, creo que radica en que la sociedad del siglo XXI se ha vuelto muy cómoda en el sentido de que consideramos mucho más sencillo entrar en una plataforma digital que nos ofrece distintos recursos para nuestro entretenimiento y que no implican esfuerzo alguno. Del mismo modo, se han vuelto virales los audiolibros, haciendo totalmente innecesaria la lectura.
En definitiva, nos hemos convertido en una sociedad en la que las personas tenemos todo al alcance de nuestra mano y por lo tanto, no queremos tener que realizar esfuerzos. Pobres e ingenuos de nosotros/as que no sabemos que cultivar la mente es lo único que realmente nos hace ricos, libres y no nos hace perder el tiempo.
Un saludo, Leticia A. Díaz Pérez.
El gusto por la lectura lo tenemos todos, solo hay que saber avivar su llama. La problemática actual radica en la manera en la que se pretende inculcar el hábito lector, pues nos encontramos con una realidad en la que se plantea la lectura más como una obligación que como un placer y una forma de pasar tu tiempo de ocio. Ante esto, los niños y niñas ven disociada la imagen de un libro a una tarea formal más.
ResponderEliminarRecuerdo cómo cuando mi hermana era pequeña, un día entré en su habitación y estaba leyendo un libro del colegio, le pregunté ¿qué estás haciendo?, y ella me contesto: estoy estudiándome este libro, que tengo un examen. Siempre me ha resultado muy curiosa esta situación, porque refleja muy bien lo que se está haciendo mal en lo que se refiere a este tema.
Leo desde hace muchos años, y siempre intento descubrir nuevas cosas, y las encuentro. La literatura no es solo novelas, es teatro, poesía, biografía, fantasía, etc.
Soy de los que piensa que hay un libro para todo el mundo, solo hay que pararse a buscar lo que es para cada cual.
Un saludo,
Raúl García-Pérez Febles
Al leer este post, se reflejan mis pensamientos acerca de esta temática. Como bien señala Cicerón: "a hablar no se aprende hablando, sino leyendo". Lejos de la imagen introvertida y solitaria que nos presentan las películas y series de televisión, en realidad considero que las personas que leen poseen más habilidades comunicativas y no solo eso, sino que tiene una mayor capacidad de comprensión a la hora de percibir cualquier información, ya sea vía oral o escrita. Los libros físicos generalmente nos permiten tener un mayor control de la lectura, de manera que estos nos permiten marcar con total facilidad cualquier cosa que queramos reflejar sobre las hojas del libro. Se ha destacar el aspecto que alega la autora Lidia, sobre la llegada de las nuevas tecnologías a la sociedad. Es intachable que hoy en día nuestra rutina gira en torno a estar en total contacto y uso con aparatos electrónicos los cuales no generan una gran facilidad para comunicarnos e incluso para informarnos, pero no se ha de evadir la idea que los grandes libros son los que contienen el verdadero conocimiento. ¡Hagamos uso de los libros, porque leerlo nos enseña más que hablar con su autor!
ResponderEliminarEn el mismo sentido en que se desarrolla el texto, se hace interesante entender el hábito lector como aquel que se inculca desde la infancia y va evolucionando durante los años. Este hábito se adquiere mediante la imitación, la curiosidad y el placer. Por ello, los docentes, profesionales de la educación y las familias debemos tomarlo como un acto que nos evade y nos enriquece al mismo tiempo, y esto, como es lógico, no se hace desde la imposición o desde la obligatoriedad, sino ofreciendo y dejando libertad para ello.
ResponderEliminarEn muchas ocasiones nos encontramos con valoraciones que afirman "no tengo tiempo para leer", "me gustaría, pero no encuentro el momento" o simplemente "a mi leer no me gusta". Debemos analizar que subyace tras estas explicaciones, ya que, normalmente, que sustentan en excusas o falsas creencias. Decir que no nos gusta la lectura es caer en el error de generalizar y arriesgarnos a abordar desde lo superficial.
Los libros nos invitan a conocernos y a conocer el mundo, a explorar nuevas realidades, a reflexionar y cuestionar, a romper con los establecido para crecer. Por ello que en la educación para la lectura sean tan importante compartir, ofrecer, recomendar para alimentar ese interés que en ningún caso puede forzarse. De esta manera, el propio lector encontrará ese libro que lo remueva y atrape
Siguiendo en la línea de lo que dicen mis compañeros, es necesario destacar la importancia de la lectura en nuestras vidas y en nuestro día a día. Leer, es una de las mejores habilidades que podemos adquirir. Ella nos acompañará a lo largo de nuestras vidas y permitirá que adquiramos conocimiento, y que entendamos el mundo y todo lo que nos rodea. Desde bien pequeños nos enseñan las letras y palabras en la encomiable (y necesaria) acción de la enseñanza. Todos somos capaces de recordar esos primeros momentos de lectura y quién estaba a nuestro lado para enseñarnos (profesores, familiares…), sin llegar a darnos cuenta de la importancia que ello tenía. En relación a los nuevos avances tecnológicos frente a el olvido de la lectura, estoy totalmente de acuerdo contigo Lidia, ya que cada día influencia más en los niños, porque desde bien pequeños en vez de ponerles un libro, les ponen un videojuego, fomentando así que el niño crezca con ese mundo.
ResponderEliminarALEXSA CASTRO MARTIN
Me siento totalmente identificada con Dayda. Me ocurrió algo similar, y es que hasta la adolescencia leía por obligación, hasta el día que me topé con la docente que me dejó elegir género literario, y hasta ahora, alrededor de 13 años después, sigo disfrutando al máximo de la aventura de leer.
ResponderEliminarPatricia Francisco Lázaro
Para mi la lectura es un amor difícil, con el cual a veces nos peleamos y se aleja, a veces desearíamos que estuviera más tiempo con nosotros y la vida de vez en cuando se nos complica más de lo que pensamos, relegando así esas pasiones que encontramos en nuestra soledad y en nuestra intimidad. Como amante de los libros y de la lectura, leer este blog me cuestiono varias cosas, por un lado, creo que es muy válido el pedido del niño cuando dice que no le regalen libros, a sus 11 años está descubriendo elementos novedosos tecnológicos que lo maravillan y lo inquietan, que despiertan su curiosidad, su interés y por tanto su tiempo libre, lo cual no deja de ser interesante y enriquecedor.
ResponderEliminarTambién, estoy de acuerdo con lo que se plantea, con esa posibilidad de crear, inventar y conocer mundos maravillosos a través de un par de letras, de darle vida a personajes que solo existen en tanto le damos una voz. Varios libros han marcado mi vida, me han acompañado en tiempos felices y en otros que no lo son tanto; en este momento recuerdo “El túnel” de Ernesto Sábato, fue “mi primer amor”, fue mi punto de partida para encontrar ese amor que no había descubierto antes. Este libro llegó a mi, sin ninguna pretensión, sin ninguna obligación, sin ningún mandato… allí se aplica lo que decía Cortázar “Como si se pudiera elegir en el amor, como si no fuera un rayo que te parte los huesos…” esta frase no solo habla del amor romántico; para mi, habla de la vida, de lo que nos emociona, lo que nos elige cada día y que comienza a ser parte indispensable de nosotros.
Maria Paula Cely Sánchez
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ResponderEliminarLa lectura ha ido cogiendo fuerza durante los últimos años, más aún a partir de la pandemia. Podemos encontrar en internet (Tik Tok, Instagram, etcétera) miles de comunidades en las que se hablan de recomendaciones de libros, y se dan opiniones acerca de ellos. Sin embargo, estoy hablando de una minoría de adolescentes y adultos, donde los niños lectores no se puede apreciar con tanta facilidad.
ResponderEliminarA mí me gusta leer, y hace años consumía libros como oxígeno. Podía leerme en una semana tres libros, pero tras la pandemia, mi capacidad de concentración disminuyó, y con ello mi interés en la lectura: el tan llamado y terrorífico "bloqueo lector". Pienso que para que a un niño le guste leer, no se le puede presentar la lectura como un concepto obligatorio que provoque una aversión hacia cualquier tipo de libro. Desde mi punto de vista, la introducción de la lectura desde edades tempranas se debe hacer, pero teniendo en cuenta un factor muy importante: ¿Qué le gusta al niño o a la niña? A mí de pequeña me gustaban los libros de Gerónimo Stilton, por lo que si me traías los de Harry Potter, probablemente te diera las gracias, pero no tendría ganas de leerlo. Pues lo mismo ocurre en las aulas. Entiendo que se deba fomentar una lectura más formal y profunda (véase cualquier libro que te mandaban obligatoriamente a leer en el instituto, como "La sombra del viento" de Carlos Ruíz Zafón). A muchos no les gustaba, o no los leían directamente porque no estaban enfocados a sus gustos, y sí, para gustos colores (es decir, hay muchos y muy diferentes), pero es que si quiero leer algo, leo aquello que me interese.
Por otra parte, creo que está bastante claro que el uso de las tecnologías de forma descontrolada de los niños ha influido en la disminución del interés por la lectura. Sin embargo, también es viable compaginar tecnología y lectura, puedes introducir ambos conceptos desde pequeños, alegando a sus intereses y gustos, y probablemente ese niño o niña crezca leyendo y usando la tecnología sin problemas. Además que la tecnología puede ayudar en parte a fomentar la lectura gracias a los libros electrónicos, ya que desgraciadamente comprar libros cada vez se convierte más en un lujo por los precios altos.
En conclusión, si bien se ven muchos casos en los que los niños no leen, también hay que darse cuenta de que si no lo hacen es porque le introducimos la lectura como una obligación, y no atendemos a sus gustos. Por lo que sí, tenemos que hacer un esfuerzo nosotros también porque en parte tenemos la solución delante de nuestros propios ojos.
ResponderEliminarTal y como bien se apunta en este post, la lectura de libros ha pasado a un segundo plano y, desde mi punto de vista, de manera totalmente inconsciente. Digo totalmente inconsciente porque la era tecnológica en la que vivimos ha ido implantando un modelo de vida del cual somos partícipes sin darnos cuenta. Cada vez son más las horas que nos pasamos en frente de una pantalla porque, a su vez, cada vez todo está más digitalizado.
Hemos de admitir como la tecnología nos ha ido cambiando, nos cambiará la vida y traerá consecuencias con ello y, una de ellas lo estamos viviendo ya. Es preocupante ver cómo niños de 10-11 años, en lugar de pedirle a los Reyes Magos algún libro o cuento, lo que le piden son dispositivos electrónicos. Algo está haciendo mal la sociedad para que en lugar de construir personas llenas de sabiduría lo que hagamos sea alimentar ese sosiego tecnológico que nos rodea. El entorno familiar y escolar debe propiciar el valor de la lectura y mostrarle a los niños y niñas todo lo que se puede aprender de ella.
Por lo que a mí respecta, mis padres me inculcaron el valor de la lectura desde bien pequeña. No recuerdo ningún cumpleaños o Navidad donde no hubiera libros de regalo. Mis padres se preocuparon en todo momento de que adquiriera un hábito de lectura para que me nutriera de ello y es algo que a día de hoy más valoro.
He de decir, que hubo una época, durante mi paso en el instituto, que perdí ese hábito. Cuando te imponen, por obligación, el requisito de leer libros, desde mi punto de vista, no captas igual la esencia de la lectura y eso fue lo que ocurrió. Durante toda la secundaria y bachillerato estuve sometida a leer libros que no atendían para nada a mis gustos y aún así hacía el esfuerzo y los leía. Sin embargo, una vez entrada en la universidad, volví a retomar este hábito lector que mis padres me inculcaron con libros que me interesaban de verdad, libros que atendían a mis gustos y así hasta hoy en día. Soy consciente de que algunos me gustan más que otros, que a veces sí tengo esas ganas de leer y a veces no me apetece en absoluto, pero creo que lo verdaderamente importante está en no dejar pasar ese hábito, en no dejar que las tecnologías se apoderen de nosotros y que perdamos la forma de adquirir unos conocimientos y valores que contribuyen a una mejor comprensión tanto del mundo en el que vivimos, como de nosotros mismos.
El post “No me regales libros” me ha llevado a varios pensamientos y, como bien destaca al final, a reflexionar qué es lo que ocurre con la lectura en el contexto escolar. En cuanto a mi experiencia, todas las noches durante mi infancia le pedía a mis padres que me contaran un cuento, era algo que adoraba y realmente disfrutaba. A medida que fui creciendo, los libros que nos mandaban a leer para que hiciéramos un resumen eran elegidos por los docentes y no por nosotros, por lo que no contábamos con esa motivación desde el principio, además, al imponernos que lo hiciéramos, en mi opinión provocó que nos fuera dejando de gustar la lectura. De la misma manera ocurrió en la ESO con la asignatura de Lengua Castellana y Literatura, pero no solo eran una cantidad de libros elegidos por los profesores de Primaria sino que directamente pasaba a un solo libro para todos los alumnos/as de la clase. Ahora lo pienso y me da pena que haya provocado en la mayoría de mi grupo de clase rechazo hacia la lectura porque hace poco tiempo quise retomarlo y a día de hoy estoy sorprendida de que salga de mí leer y disfrutar de la historia que estoy leyendo. Siempre me habían dicho que no me gustaba la lectura dado que no había encontrado un libro adecuado para mí, ahora pienso que tenían y tienen mucha razón.
ResponderEliminarMe gustaría mencionar acerca de la tecnología que hemos llegado a un punto que todo gira entorno a los teléfonos móviles, portátiles, tablets, teles, pero también a robots que han quitado puestos de trabajo, a la inteligencia artificial que ha perjudicado a diseñadores gráficos o a escritores ya que la generación de contenido donde la producción de estos es más rutinaria. Con todo esto quiero decir que vivimos cada vez más en un mundo digitalizado y continuará siendo así. Deberíamos de hacer algo para frenarlo, llegará un punto en que se perderá lo vivencial, lo cercano entre las personas dado que se le dará más importancia a las redes sociales, no habrán puestos de trabajos porque habrán muchos robots, entre otros aspectos. No solo me preocupa el mundo adulto sino la infancia de muchos niños y niñas que he podido ver en restaurantes donde los familiares dejan que estén viendo vídeos para que se comporten bien, también la lista de Los Reyes Magos en la que estando en el primer ciclo pedían play, tablets…Me parece impresionante y muy triste que en “tan poco tiempo” que ha pasado desde que estaba en primaria a día de hoy, los deseos de los jóvenes sean lo mencionado anteriormente y no juguetes que era lo que yo pedía de pequeña.
Coincido con que la lectura en cualquier época de la vida y a cualquier persona le es un pilar fundamental tanto para su educación como para cualquier otro aspecto del día a día.
ResponderEliminarEn mi caso la lectura no me apasionaba hasta hace unos dos años; ningún libro me atrapaba y enamoraba de cada una de sus hojas, pero cuando esto sucedió hace que cada vez que leo me transporte a la vida de ese/a personaje y sienta como si fuera yo quien está haciendo todo eso que leo.
Actualmente se utilizan las tecnologías como el medio para todo y al comunicarnos por ellas escribimos inadecuadamente e incluso abreviamos palabras y seguramente alguna vez escribiendo a papel nos ha llegado a costar escribir algo por esto mismo. La lectura da mucha sabiduría que, además de poder integrarte como un solo ente con el libro, ayuda a mejorar en el vocabulario, en las faltas de ortografía y en la forma de escribir.
Debemos aprender a proporcionarles al alumnado un uso adecuado de las TICs donde si prefieren un dispositivo electrónico antes que un libro físico, pueden leer un cuento a través del ordenador pero sabiendo la importancia que tiene la lectura en cada uno de nosotros.
La lectura plantea un dilema intrigante al contrastar la pasión por la lectura que el niño tenía en su infancia con la actual realidad, donde las pantallas han tomado el protagonismo. El rechazo de los libros como regalo indica un cambio en sus preferencias, evidenciando cómo las múltiples pantallas han desplazado a la lectura tradicional. Este cambio refleja la transformación de los hábitos culturales y la influencia de la tecnología en la vida cotidiana.
ResponderEliminarAl leer este post, nos anima a considerar cómo la lectura puede actuar como un salvavidas, proporcionando conocimiento, perspectiva y una vía para resistir y enfrentar los desafíos de la vida.
Esto me lleva a reflexionar sobre mi propia relación con la lectura. Aunque no he sido una entusiasta de la lectura, encuentro que cuando la historia me cautiva, experimento una sensación maravillosa. Reconozco la importancia fundamental de la lectura para el aprendizaje, pero también la relevancia de seleccionar lecturas atractivas en el entorno educativo. Si el contenido no logra captar el interés o entretener, es probable que el alumnado no se involucre en la lectura. Por ello, resulta crucial considerar cómo seleccionar lecturas cautivadoras que atraigan a los estudiantes. Es común observar casos en los que los niños evitan la lectura, y debemos reconocer que esto suele ocurrir cuando se introduce la lectura como una obligación, sin prestar atención a sus preferencias. Además, es importante destacar que la lectura sigue siendo una fuente poderosa de enriquecimiento personal y profesional
Al leer el inicio del post planteado, me hizo acordar a mi niña interior. A ella también le encantaba escuchar cuentos leídos por sus padres a la hora de dormir o leerlos ella misma una y otra vez, pero no sé exactamente en qué momento dejó de encantarme, de hecho, yo también llegué a decir: “puedes regalarme lo que sea, menos libros”.
ResponderEliminarLo que sí recuerdo fue el día en el que esa pasión por la lectura volvió a inundar mi vida. Por algún motivo que desconozco, mi madre y yo fuimos a comprar a una tienda y en ella había de todo, incluídos libros. Estaban perfectamente colocados en la entrada de la misma y por simple curiosidad fui leyendo todos los títulos hasta que uno de ellos llamó mi atención. Decidí leer sus primeras páginas y me atrapó. Lo pedí por mi cumpleaños y fui la niña más feliz del mundo al ver que me lo habían regalado.
Quizás todos y todas hemos pasado por esa etapa y más en la sociedad en que vivimos, donde las tecnologías y programas basura nos abordan continuamente. A día de hoy, la gran mayoría de chicos y chicas dicen que no les gusta la lectura, pero igual lo que no les gusta es leer libros de amor y fantasía. Cada persona debería buscar libros y lecturas acerca de sus gustos y preferencias, al igual que las escuelas tendrían que dejar de exigir a su alumnado que lean siempre los mismos libros.
La lectura además de importante, es muy bonita, sea sobre aventuras, amores, misterios o coches y no podemos perderla. Tal vez el problema somos nosotros, que no buscamos algo que nos interese realmente o que no fomentamos a los demás de una manera distinta y correcta. Obligar no es sinónimo de incentivar.
Coincido con la autora de este post ya que en los tiempos que corren, muchos niños y niñas prefieren estar frente a un dispositivo tecnológico, por lo que hace un proceso de transformación de las preferencias de lectura de los niños a medida que van creciendo. Asimismo, destaca el placer de la lectura ya que puede ser una gran fuente de alegría y aprendizaje pero que se ha visto desplazada por las nuevas formas de entretenimiento más visuales y tecnológicas.
ResponderEliminarMe ha llamado la atención el momento en el que la autora de este post hace referencia a la lectura que realizó sobre la trilogía de “El Señor de los Anillos”, esto es debido a que me impactó que se sumergiera por horas en este libro, que se teletransportarse y se sintiera dentro del mismo, ofreciendo una pausa temporal con la realidad cotidiana. Es por ello por lo que pienso que la lectura es una herramienta valiosa para conectarse con las experiencias de otros y poder expandir nuestra mente.
Asimismo, la lectura puede salvarnos de diversas controversias que tengamos en nuestras vidas, ya sean sociales, afectivas, profesionales, psicológicas… Aunque a veces se tome la lectura como un acto “obligatorio”, muchas veces hace falta.
Finalmente, el artículo nos invita a reflexionar sobre la forma en la que abordamos la lectura, tanto a nivel personal como en contextos escolares, además de la capacidad que tienen algunos libros de “salvarnos” de la ignorancia y otros desafíos que se nos presentan en nuestra vida y ayudarnos con nuestra formación personal y profesional.
Hoy día los videojuegos, Tablet, en definitiva la tecnología esta haciendo que los niños/as se interesen menos por la lectura. Es verdad que la tecnología les transportan a mundos de fantasía como cualquier libro, pero no es lo mismo ver un mundo que puedes ver con tus propios ojos a otro que solo lo puedes ver con la imaginación como te lo puede hacer un libro. La lectura no solo hace que los niños/as se culturicen, también les hace ser creativos y que piensen por ellos mismos.
ResponderEliminarA mí me pasó al revés, de pequeño no leía nada y estaba siempre jugando a videojuegos. De mayor me prestaron el libro de Zafón "La sobra del viento", me lo llevé a la playa y empecé leerlo. Cuando me di cuenta ya habían pasado dos horas y no me di ni cuenta, a partir de entonces estoy empezando a leer más, ahora también me estoy empezando a poder comunicarme mejor gracias a la lectura.
En definitiva, estoy de acuerdo con lo que dice el artículo ya que las nuevas tecnologías están haciendo que los niños y niñas lean menos y la lectura es algo que te hace crecer como persona.
Me ha parecido interesante este post, porque lo primero que se me ha venido a la cabeza ha sido lo feo que me parece que un niño pida que no se le regale algo por su cumpleaños, y menos un libro, en segundo lugar he pensado que quizás no le gustaba la lectura y por eso prefería que se le regalase otra cosa, pues como en mi caso, hasta bien entrada la adolescencia no descubrí este apasionante mundo de la lectura. Sin embargo, al continuar leyendo, me he dado cuenta de que no quiere libros, no porque no le guste leer, de hecho le gustaba mucho cuando era más pequeño, sino porque ahora las pantallas ocupan todo su tiempo y no quería un libro para tenerlo cogiendo polvo sin usarlo, preferiría algo que sí usara.
ResponderEliminarNo obstante, si reflexionamos sobre qué ha llevado al niño a tener tal adicción a las pantallas y abandonar la lectura, podemos concluir que gran parte de la culpa o el favorecimiento de una herramienta frente a otra se debe a que los padres han encontrado en los teléfonos móviles o aparatos digitales una vía de escape, una herramienta para mantener a los niños y niñas quietos, callados, y sin molestar. Provocándoles a sus hijos e hijas una distracción, en lugar de fomentar en ellos el simple hecho de ser niños, jugar, gritar, leer.
De esta forma, provocamos sin saberlo una adicción de los más pequeños a las pantallas, y cuando sean mayores y deban conocer libros, autores, tener gusto e interés por la lectura, no lo tendrán y les echaremos la bronca, porque no quieran leer o estudiar, cuando los causantes de su falta de interés han sido los mayores. En lugar de fomentar en los niños y niñas, hábitos saludables para que se formen sabiamente y construyan de sí mismos un ser culto, sabio y educado, estamos propiciando una sociedad inculta, vaga y maleducada. ¿Por qué? Porque el teléfono móvil es la opción fácil, para que el niño esté calladito, quietito y sin molestar.
La lectura, los libros frente a la tecnología, siempre ha sido un tema muy controversial, pero es una auténtica realidad que en estos tiempos en los que vivimos la lectura ha pasado a un segundo plano, liderando el primero las tecnologías. Parece que ya no es relevante el fomento de la lectura, pero sin embargo en las escuelas y en los hogares lo primero que se le da a los niños es un tablet o un móvil para que se entretengan, y lo usen en su tiempo libre a modo de recompensa.
ResponderEliminarMe gustaría añadir, que bajo mi experiencia propia, la lectura nunca ha sido algo importante en mi vida, y digo esto porque durante mis años académicos la vi más como una obligación, en vez de una ventana a la cultura, superación, fantasía, mundos nuevos, etc. En la asignatura de lengua siempre era obligatorio leernos un libro, por supuesto no era un libro elegido por nosotros, sino uno que el docente o el instituto imponía. Con eso lo único que creaban era que nos viéramos obligados a leer para aprobar un examen, sin disfrutar del libro, porque muchas veces nos lo leíamos el día antes del examen, sin incluso entender del todo bien de lo que iba la novela. Era un sufrimiento, puesto que yo no recuerdo que me gustase ninguno de esos libros.
Para mi es muy triste que en los centros educativos no se ayude al alumnado a descubrir qué es lo que les gusta leer, su género favorito, lecturas libres que luego sean compartidas con el resto de la clase, hacerles ver que pueden disfrutar de un mundo totalmente nuevo. En cambio, ahora desde los niveles más pequeños solo se fomentan las tecnologías, las tareas en una plataforma de internet, juegos educativos, tablets, portátiles. Por supuesto que ya los más pequeños saben manejar un dispositivo mejor que los adultos, y que si en un cumpleaños o en alguna festividad se les regalase un libro lo aceptarían con desprecio o incluso no lo aceptarían. Deberíamos cambiar esto, porque también es algo que afecta a las relaciones personales, ya que cada uno está conectado a un dispositivo, chateando, viendo videos, en vez de dialogar cara a cara y crear vínculos. Si seguimos así se perderá lo real, lo verdaderamente vivencial.
AINARA DELGADO PÁEZ
ResponderEliminarCoincido totalmente con lo dicho en el blog. Actualmente, vivimos en una sociedad donde la lectura, los libros y la literatura en general se está perdiendo. Nosotros como futuros maestros tenemos la oportunidad de trasladar a los alumnos esa ilusión por leer, mostrarles que es algo de lo que se puede aprender mucho pero además, divertirse tanto como ver una película a través vez de la pantalla.
La lectura nos puede aislar y de esta manera también ayudarnos en muchos ámbitos. Pienso, que es algo que si se inculca desde chiquitos a pesar de tener las nuevas tecnologías muy a nuestro alcance, es algo que puede perdurar, como una costumbre, como algo que gusta.
Considero que esa dejadez de leer libros por parte de los niños también viene de esa pequeña obligación en la escuela a leer. Al notar que es algo que tienen que hacer si o si porque si no está mal, les puede acabar echando para atrás hasta dejar de gustarles. Deberíamos dejar también libertad en este sentido que el niño lea lo que le apetezca en el momento que le apetezca pero sin dejarlo pasar.
YAIZA HERNÁNDEZ RAMÍREZ
ResponderEliminarComo futura docente, de acuerdo con lla importancia de los libros en el proceso educativo es innegable. Los libros no solo son fuentes de conocimiento y herramientas para el aprendizaje, sino que también fomentan habilidades como la comprensión lectora, el pensamiento crítico y la empatía al exponer a los estudiantes a diferentes perspectivas y realidades. Sin embargo, en la era digital, la digitalización de los libros ha planteado desafíos significativos para la lectura.
La digitalización de los libros ofrece ventajas en términos de accesibilidad y portabilidad, pero también presenta obstáculos que dificultan la experiencia de lectura. Las distracciones digitales, como las redes sociales, los videojuegos y el contenido multimedia, compiten por la atención de los estudiantes y pueden eclipsar el tiempo dedicado a la lectura. Además, la lectura en dispositivos electrónicos puede causar fatiga visual y dificultar la concentración, especialmente en entornos donde los estudiantes están constantemente expuestos a pantallas.
Como docentes, es crucial encontrar estrategias para fomentar la lectura en un entorno digitalizado. Esto puede implicar promover la alfabetización digital y el uso responsable de la tecnología, así como proporcionar acceso a libros impresos y recursos digitales de calidad. También es importante crear un entorno escolar que valore y promueva la lectura, ofreciendo tiempo dedicado a la lectura recreativa, oportunidades para explorar una variedad de géneros y temas, y fomentando la discusión y el intercambio de ideas sobre los libros.
Además, es fundamental involucrar a los estudiantes en la selección de libros y en la creación de un ambiente de lectura que sea relevante y estimulante para ellos. Al hacerlo, podemos ayudar a cultivar el amor por la lectura y equipar a nuestros estudiantes con las habilidades y el conocimiento necesarios para prosperar en un mundo cada vez más digitalizado.
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ResponderEliminarCon certeza y basándome en mi propia experiencia, puedo afirmar que la lectura es un efectivo inhibidor del mundo real; entiendo muy bien esa sensación inicial del infante y la escritora del artículo. Leer potencia la creatividad, pues a partir de las palabras que encontramos entre las páginas de un libro, podemos crear millones de escenarios y soñar despiertos mientras nos sumergimos en la realidad alternativa que se nos propone.
ResponderEliminarEn referencia al apartado del artículo sobe electrónica, es un hecho que el contenido multimedia ha ido tomando fuerza a lo largo de su desarrollo en los últimos años, pues esas realidades que antes solo podíamos imaginar, ahora se materializan, siendo posibles de experimentar también con los sentidos visual y auditivo. Las tecnologías informáticas no son malas, al contrario, pero como todo lo que se considera sano, deben utilizarse con moderación. Es por ello que tendremos que hacer entender a nuestro alumnado que existen alternativas a las pantallas. Que también es bueno leer y que se aprende tanto de un libro, del que sea, como de un video tutorial o una simple serie de animación.
Todos, en algún momento de nuestra travesía por la enseñanza obligatoria, hemos sido víctimas de las lecturas impuestas por el profesorado. Y utilizo el término víctimas porque considero un atentado contra las mentes de los niños y niñas, la imperatividad de leer un libro que les interesa en lo más mínimo y que, a pesar de su contenido educativo, de nada servirá ante la irrelevancia que supone la obligatoriedad de la lectura. Más aún cuando son sometidos a un examen para comprobar que se han enterado de lo que ocurre en la trama. Todos sabemos que se puede superar fácilmente este tipo de pruebas tras haber leído un extenso resumen del libro, que no ocupa al alumnado más de 15 minutos, ante la prolongada atención que requiere la obra completa. ¡Cuánto daño han hecho los contratos con editoriales!
Aunque me parece preocupante que deba ser obligatoria la lectura de una cierta cantidad de libros por parte de las escuela. Me lleva a reflexionar sobre la situación de decadencia en la que se ha visto la acción de leer como para que tenga que ser impuesta y no ejecutada por propia voluntad y placer.
Insisto, contar con la aprobación del alumnado es de suma importancia. Debemos basarnos en sus intereses y necesidades. Sólo así conseguiremos un hábito de lectura y estaremos formando a nuestro alumnado desde un refuerzo positivo, haciéndolos sentir protagonistas de su propio aprendizaje, validando lo que piensan y que, de paso, disfruten de poner en práctica el maravilloso mundo de la lectura.
Como propuesta para trabajar sobre este tema, me gustaría mencionar la propuesta que se ha llevado a cabo en mi cole de prácticas, para incentivar a los a leer:
Los niños y niñas seleccionaban un libro, se les pedía que lo trajeran a clase para obtener la aprobación del profesor. Se daba un periodo de tiempo pertinente para leerlo y debían entregar una ficha de análisis del libro. De esta forma, el alumno está trabajando con contenido que conecte con sus intereses.
Debemos ser conscientes del poder educativo y la influencia que tienen los libros. Es por ello que tenemos que ser cuidadosos y fomentar una lectura responsable y enriquecedora para el alumnado. Al final, la manera más eficaz de transmitir el conocimiento, es dejando constancia del mismo por escrito.
Este post que lleva por título "¡No me regales libros"! nos muestra de manera directa la importancia de la lectura y cómo puede influir esta de manera positiva en nuestra vida personal y profesional. Asimismo, hace hincapié sobre el uso excesivo de las tecnologías que limitan el uso de los libros, mostrando así la preocupación sobre esta nueva realidad.
ResponderEliminarTal y como menciona la autora en este artículo, la práctica de la lectura en los niños y niñas actuales ha quedado en un segundo plano, debido a que actualmente estamos inmersos en un mundo tecnológico que nos atrapa y aparta de la realidad y con ello de la lectura, siendo el relato del niño que antes amaba los libros y ahora prefiere otros entretenimientos digitales y tecnológicos un ejemplo de ello. Además de ello, cada vez dedicamos más tiempo de nuestras vidas frente a una simple pantalla, debido a que actualmente todo está más tecnológico ignorando así todo aquello que nos rodea.
Por todo ello, desde mi punto de vista considero que es bastante preocupante el impacto de la tecnología en la sociedad, especialmente en aquellos niños y niñas que valoran más los dispositivos electrónicos que los libros, debido a que el hecho de que un niño o niña prefiera un dispositivo electrónico en lugar de leer un libro indica un problema importante sobre la apreciación de la lectura y la adquisición de nuevos conocimientos a través de medios más tradicionales como lo pueden ser los libros.
Finalmente, me gustaría añadir que la educación familiar y escolar con respecto a la lectura desempeña un papel fundamental, puesto que promover la lectura y destacar sus beneficios tanto en casa como en el aula ayuda a que los niños y niñas tomen conciencia y hábito de lectura. Dicha afirmación la puedo corroborar desde mi punto de vista, debido a que desde muy pequeña mis padres me han inculcado la importancia de la lectura y con ello su valoración desde una edad temprana. Todo ello me ha ayudado a dejar un poco las tecnologías a un lado y poder adquirir conocimientos y valores y un enriquecimiento personal a través de la lectura.
Este post resalta una preocupación cada vez más común en la sociedad: El declive de la lectura en la población, concretamente entre los mas jóvenes, todo ello en gran parte debido a la creciente influencia de las pantallas digitales. La anécdota del niño que rechaza los libros como regalo en su cumpleaños es un ejemplo concreto de cómo la tecnología puede eclipsar los placeres y beneficios de la lectura.
ResponderEliminarComo individuos, estamos constantemente bombardeados por una avalancha de información digital, que compiten por nuestra atención y tiempo. En este contexto, la lectura de libros se ha vuelto cada vez más una actividad de segundo plano, sin prioridad ninguna.
El artículo nos recuerda la importancia y el valor de la lectura. La capacidad de sumergirse en mundos ficticios o explorar realidades diferentes a través de las palabras impresas es una experiencia única y enriquecedora que no puede ser replicada por ninguna otra forma de entretenimiento. Personalmente, he experimentado esa sensación de transportarse a otros universos y vivir aventuras a través de la lectura de libros, al igual que el autor mencionado con la trilogía de "El Señor de los Anillos".
Este post nos invita a reconsiderar nuestra relación con la lectura y a reconocer su importancia. Nos desafía a encontrar un equilibrio entre el mundo digital y el mundo literario, y nos recuerda los beneficios profundos que la lectura puede aportar a nuestra vida. Como individuos y como sociedad, es crucial preservar y fomentar el hábito de la lectura para garantizar un futuro en el que todos tengamos acceso a las infinitas posibilidades que los libros ofrecen.
Leyendo este post me traslado automáticamente a mi niñez, mi madrina, Ana Seida, era una fanática de la lectura y de las manualidades, siempre en las fechas importantes me regalaba un libro, y como este niño le decía que me regalase cosas más “guays” sin saber el favor que me estaba haciendo. Siempre que me regalaba un libro, me lo dedicaba con unas bonitas palabras, estos libros los guardo con mucho cariño y releo cada vez que puedo, me hacen trasladarme a los bonitos momentos que viví con ella y cuando me los leía haciendo diferentes voces para adentrarme más en la lectura. Ella ya no está con nosotros y le agradezco estos regalos que me hacía aunque en ese momento no lo valoraba lo suficiente.
ResponderEliminarEste post me ha hecho reflexionar sobre el gran efecto que ha tenido el desarrollo tecnológico en la juventud. Estos han dejado de lado una actividad tan importante como es la lectura debido a las pantallas, ya sea la TV, consolas, etc...Debido a esto se ha notado considerablemente un aumento de faltas de ortografía por parte del alumnado.
ResponderEliminarPor lo que como futuro docente me ha hecho reflexionar sobre la importancia de fomentar este tipo de actividades en edades tempranas. Eso sí tenemos que tener en cuenta que fomentar no es obligar a los alumnos a leer puesto que esto desencadenaría lo contrario a lo que queremos que es que los alumnos lean por si solos. Por esto creo que es muy importante que los niños encuentren por ellos mismos ese libro que le enganche por la lectura a través de libros que ellos decidan leer.
Para concluir pienso que este tipo de aspecto se debe fomentar y no obligar como se hace en muchos casos en los niños, puesto que la lectura trae muchos beneficios. Con esto quiero decir que es beneficioso que los niños lean cualquier libro que le interese. Ya que muchas veces los padres no consideran adecuados los libros que estos quieren leer y prefieren optar por algo más "beneficioso" en su opinión para ellos. Esto es debido a que los padres piensan que los libros que quieren leer son muy fáciles y no les aporta ningún beneficio. Lo cual es totalmente falso puesto que la lectura de cualquier libro siempre resulta beneficioso para los niños, especialmente para su ortografía y léxico.
Por desgracia este post refleja la realidad actual en la que vivimos. Donde en la vida de muchas personas, los libros y la lectura han sido sustituidos por la tecnología y las pantallas. Tras leer este post me parece muy triste que a un niño no le gustaría recibir un libro, algo tan fundamental para el desarrollo de las persona y que a todos nos solía gustar.
ResponderEliminarQue yo recuerde toda mi infancia estuvo rodeada de libros y cuentos que me gustaban, tanto en mi casa como en el colegio. Creo que la lectura es algo necesario para todos y no habría porqué odiarlo o encontrarlo aburrido. Estamos tan acostumbrados a las pantallas y a las imágenes que cuando llega la hora de sentarse a leer, te distraes y con lo mínimo y pierdes el interés.
Por ello, la lectura debería fomentarse desde pequeños en la escuela o en casa, para que los niños no "tengan" que leer, sino que quieran y disfruten hacerlo. Para que en un futuro los libros físicos puedan seguir existiendo y no solo se lea a través de pantallas.
Estoy completamente de acuerdo con este post.
ResponderEliminarLa importancia de los libros en la educación es innegable, ya que no solo proporcionan conocimiento, sino que también desarrollan habilidades como la comprensión lectora y el pensamiento crítico.
Sin embargo, es cierto que nos hemos visto obligados a “actualizarnos” y trasportar la lectura al mundo digital y hemos dejado atrás el papel y la escritura a mano, llegando a desafiar tanto a la lectura como a la educación en general.
Nosotros, como futuros docentes debemos encontrar estrategias claves para promover, motivar y fomentar la importancia de la lectura. Empezando con concienciarnos, que no todos tenemos los mismos gustos, por lo que no podemos obligar a leer un libro que no es del agrado de un alumno, debemos de dejar libertad.
Tras leer el post "¡No me regales libros!", no puedo estar más de acuerdo con la autora.
ResponderEliminarCuando era pequeña me encantaba la lectura. Me pasaba las tardes enteras devorando libros sin parar, era uno de mis pasatiempos favoritos, mis maestros y maestras me felicitaban por la fluidez que siempre había tenido leyendo, pero, por desgracia, con la masiva llegada de las tecnologías eso cambió. Poco a poco los libros se fueron sustituyendo por aparatos electrónicos como el ordenador o la tablet, y reemplacé la lectura por videojuegos, música y otras diversas plataformas que consiguieron atraparme y captar más mi atención.
La lectura siempre la he considerado como un vehículo de conocimiento, transmisora de ideas, valores y reflexiones, que nos permite adentrarnos en mundos totalmente imaginarios que nos alejan de nuestra propia realidad, y que sirven de autoayuda y de un rato de desconexión. No obstante, con la llegada de las pantallas a nuestras vidas, el hábito lector en muchas ocasiones se ve descuidado y totalmente abandonado. Es por ello, que nosotros, como futuros maestros y maestras, tenemos el deber de prolongar en los niños y niñas esta etapa de lectura lo más que podamos, a través de claves y estrategias de motivación para que se vean envueltos por ella, siempre y cuando sea compaginada por otros tipos de distracciones o hobbies.
No nos podemos olvidar de todas las posibilidades y puertas que nos ha abierto la tecnología hoy en día. Nos ha hecho avanzar como sociedad en todos los aspectos de nuestras vidas, desde la comunicación, medicina, educación, industria y cómo no, entretenimiento. Los libros físicos se han convertido poco a poco en libros digitales, lo que les facilita la lectura a unos, pero no tanto a otros, ya que, desde mi punto de vista, no hay nada como el placer de tener un libro en tus manos, con ese olor tan característico que los acompañan.
En definitiva, la lectura es un hábito que deberíamos de llevar a cabo en mayor o menor medida en nuestras vidas, puesto que, esta rutina conseguiría abrir más nuestra mente, llenarnos de valores y crecer como personas, intentando dejar a un lado las tecnologías y desconectando de ellas un rato al día. No podemos olvidar, que es es imprescindible que descubramos nuestros gustos y preferencias, dado que, el abanico de opciones que nos brindan los libros es extremadamente amplio y así conseguiremos una lectura más enriquecedora y beneficiosa.
Celeste Martínez
ResponderEliminarLeer, algo tan sencillo pero a la vez tan repleto de valor e importancia a todas las edades. Tras leer el artículo de mi profesora, me detuve varias veces a analizar la siguiente frase: “la lectura nos salva de la ignorancia”, la cual destacaría sin duda de esta publicación, ya que no da lugar a discrepancia, y mucho menos en lo que a términos educativos se refiere.
Podemos aprender de mil maneras diferentes, pero aquello que enseña un buen libro, aquello que transmite un autor con conocimientos y sabiduría, aquello que nos interesa y que nos es útil, difícilmente se borrará de nuestro esquema.
Como futura educadora, considero que es imprescindible acercar a los niños y niñas a la lectura desde edades tempranas, ya que de esta forma, además de desarrollar el hábito fundamental de la lectura y el aprendizaje de la misma, aprenderán a ser creativos, a pensar, a ser críticos y desarrollarán de manera agradable su imaginación.
Lamentablemente, con el uso de las nuevas tecnologías, el acto de leer por entretenimiento ha sido sustituido por consolas, teléfonos móviles, tablets y otros aparatos electrónicos, los cuales, si no se hace un uso correcto de ellos, no hacen grandes aportaciones a la formación de los infantes.
Es entendible que el uso de las TIC esté ocupando la mayor parte de nuestro tiempo, y no podemos negar los incalculables usos que se le pueden dar a las mismas. Por ello, considero que deberíamos enseñar a los y las estudiantes a buscar información veraz, a leer online, a nutrirse de conocimiento, lo único que nos salva de la ignorancia es la motivación por aprender, por ello debemos impulsar a nuestro alumnado a que lo haga.
Observando la generación en la que nos encontramos, y a la que pertenezco, claro está que las tecnologías son de gran ayuda, y como docentes debemos ponerlas de nuestro lado y enseñar a usarlas de forma correcta y con fines educativos.
Después de haber leído este post, titulado “¡No me regales libros!”, lo primero que me pensado ha sido que, efectivamente, cuando era pequeña una de las cosas que más disfrutaba con mi familia era cuando me leían libros y, además, recuerdo tener 10 años, aproximadamente, y mi mejor regalo era algún libro de “Geronimo Stilton”. Sin embargo, al cumplir 12 años y poseer mi primer móvil este deseo de leer fue disminuyendo hasta desaparecer por completo y, actualmente, leo lo justo y necesario para sobrevivir.
ResponderEliminarLo segundo que he pensado es que, el hecho de pasar el tiempo leyendo, ya sea por diversión o por necesidad, se está perdiendo y está siendo sustituido por el uso de los móviles, videojuegos, etc. Esto, poco a poco, está provocando que los alumnos más jóvenes están perdiendo el interés y les cueste más el aprender a leer o escribir, al no haber una ilusión detrás. Además, otras consecuencias por el uso de los videojuegos o los móviles es la pérdida de conocimientos culturales y el no tener interés por socializar con las personas.
Por otro lado, tampoco podemos olvidar que las tecnologías nos han ayudado y nos han facilitado el proceso de ser estudiante al proporcionar al segundo toda la información que nos es necesaria. Por tanto, lo que quiero destacar con esto es, que las tecnologías son positivas cuando hay un uso controlado y no hay una adicción detrás.
Como conclusión, acabo con este comentario destacando las últimas palabras proporcionadas por el profesor francés:
“(...) Una lectura bien llevada salva de todo, incluso de uno mismo.”
Destaco esta frase puesto que estoy totalmente de acuerdo, tanto con el profesor como con Lidia. Leer es una de las cosas más importantes que hay, no solo nos ofrece más conocimiento, una mayor soltura al escribir y al leer, sino que también nos ayuda a comunicarnos de una forma correcta y acertada. También, leer libros tiene el maravilloso poder de hacernos abandonar nuestros pensamientos para meternos en la vida de los personajes.
Cuando nos sumergimos en una lectura abrimos una puerta hacia nuevos aprendizajes, hacia el conocimiento, la imaginación y la curiosidad. Además, mediante la lectura adquirimos y enriquecemos nuestro vocabulario, mejoramos la concentración y las habilidades de escritura, y, desde que somos pequeños, la lectura nos ayuda a percibir nuestro mundo y todo lo que nos rodea a través de las historias. El hecho de que el niño no quiera recibir libros por su cumpleaños nos muestra la pérdida del hábito de la lectura, que se produce ya en los más pequeños y cada vez con más frecuencia. El mal uso de las nuevas tecnologías y de las redes sociales no solo nos aísla de esos mundos fantásticos e interesantes que nos ofrece la lectura, o de la oportunidad de adquirir nuevos aprendizajes mediante textos informativos, también nos aísla de nuestro propio mundo e incluso de nosotros mismos. De esta manera, cuando vamos caminando por la calle o nos sentamos en una cafetería, podemos ver a familias con niños/as pequeños/as incapaces de apartar la vista de las pantallas, perdiendo la oportunidad de conocer todo lo que les rodea, y la oportunidad de estar en el aquí y el ahora. En mi opinión, este hecho se debe a que cada vez resulta más fácil acceder a las pantallas e incluso lo hacemos de forma mecánica, lo que hace que los/as niños/as vivan expuestos a estímulos constantes que limitan su capacidad de adquirir conocimiento, dejando, erróneamente, la lectura en un segundo plano.
ResponderEliminarEn el texto se hace una reflexión sobre la importancia de la lectura en los jóvenes y cómo las nuevas tecnologías están haciendo un "tira y afloja " en el interés de las personas de leer una historia en papel. A través de una experiencia personal reflejada en la entrada del blog experiencia personal se hace eco de cómo la lectura puede seguir siendo una poderosa fuente de enriquecimiento transportando a los lectores hacia nuevas perspectivas . Además se presenta la obra de Daniel Pennac como algo más que una simple historia.
ResponderEliminarAdemás se invita a pensar sobre como la lectura y los libros , son capaces de salvarnos de la ignorancia al darnos nuevas formas de entender el mundo y enfrentar los desafíos. Nos invita a reconsiderar nuestra relación con los libros y la lectura.
Este texto me ha hecho recordad un pensamiento que tenía guardado en mi. La gente ya no lee tanto como antes y eso es un problema. Nos estamos volviendo más obsesionados con cosas rápidas y entretenimiento fácil. Al no leer, estamos perdiendo la capacidad de concentrarnos y entender cosas profundas. También nos estamos volviendo menos empáticos y creativos. Dejar de leer significa perder una gran oportunidad de aprender, imaginar y crecer como personas. Es triste ver cómo esto está pasando y deberíamos hacer algo al respecto para no perder toda la riqueza que nos da la lectura.
ResponderEliminarEn la escuela, el abordaje de la lectura es crucial para contrarrestar la tendencia de disminución en la práctica de la lectura. Sin embargo, en muchos casos, la enseñanza de la lectura se ha vuelto mecánica y desmotivadora. En lugar de fomentar el amor por la lectura y la exploración de diferentes géneros y temas, el enfoque se centra en cumplir con estándares y exámenes. Esto puede alienar a los estudiantes y alejarlos aún más de la lectura fuera del aula. Es fundamental que las escuelas adopten enfoques más dinámicos y centrados en el estudiante, que fomenten la conexión personal con los textos y promuevan la exploración activa y el pensamiento crítico.
La lectura aporta una serie de beneficios significativos. En primer lugar, contribuye al desarrollo del lenguaje, ampliando el vocabulario y mejorando la fluidez verbal y escrita. Además, leer estimula el cerebro, mejorando la memoria, la concentración y la capacidad de atención. La lectura también fomenta el pensamiento crítico al promover la reflexión y el análisis de la información. Además, al sumergirse en las historias y experiencias de los personajes, los lectores pueden desarrollar empatía y comprensión hacia los demás. Leer también permite explorar diferentes culturas y perspectivas, ampliando la comprensión del mundo y fomentando la tolerancia. Finalmente, la lectura estimula la imaginación y la creatividad al transportar a los lectores a mundos imaginarios y desafiando su capacidad de pensar de forma innovadora.
El tema de los libros y la actualidad cada vez es más complejo.
ResponderEliminarEn sí las nuevas tecnologías a pesar de que nos ha permitido avanzar en la sociedad y nos ha traído ventajas, como por ejemplo contactar con aquel amigo que se encuentra al otro lado del mundo, poder encontrar posibles soluciones para la cura de ciertas enfermedades…
Sin embargo bajo mi punto de vista, hoy en día nos encontramos sumergidos en ellas, siento muchas veces que las propias redes sociales, tecnologías, juegos etc nos han atrapado. Pues cada vez se va perdiendo más el valor de las cosas porque estamos acostumbrados a no esperar, a tener una respuesta en menos de un minuto y preferimos en muchas ocasiones dejarnos influenciar por las tecnologías.
Con esto quiero decir que el simple hecho de leer , es un claro ejemplo de que cada vez hay menos interés por la lectura, y esto genera a su vez una gran preocupación para la literatura y para la cultura de nuestra sociedad. Nos olvidamos que los cuentos nos pueden ofrecer mucho, aparte de información, nos permite desconectar y sumergirnos en historias de una manera más sana. Se ha ido perdiendo el olor a imprenta, a libro nuevo. Todo esto se ha cambiado por libros virtuales.Hemos olvidado lo atractivo que puede ser la lectura y considero que esto se podría evitar un poco más si los docentes y las docentes trabajaran más libros con el alumnado, tratar de recuperar ese interés y que ellos y ellas puedan ver que la lectura es importante. Aún estamos a tiempo de poder mejorar esta situación. Es triste escuchar como muchos de nuestros abuelos y abuelas darían demasiado por aprender a leer y a escribir, mientras que a día de hoy los jóvenes lo tienen sobrevalorado.
Ainara Betancor Rodríguez.
ResponderEliminarA través de la lectura de la entrada del blog “No me regales libros”, he reflexionado acerca de la escasez del hábito de lectura de las nuevas generaciones, en la que me incluyo. Así pues, después de leerlo, decidí preguntarle a mis padres al respecto y su respuesta fue que, en su época, la lectura se limitaba a las familias más “cultas y letradas”, donde se priorizaba la educación en lugar del trabajo. Además, esta condición solía ir de la mano de la situación socioeconómica de la familia. Lo sorprendente de esto, es que mi padre, que viene de una familia humilde y tiene los estudios básicos (EGB), es la persona con más hábito de lectura que conozco, en casa, tenemos una librería repleta de libros y el mejor regalo que le puedes hacer es ese. A partir de aquí viene mi reflexión, ya que él ha leído más que yo y mi hermano pequeño juntos.
Pienso que hoy por hoy, con todas las oportunidades que tenemos, hemos sustituido el libro por la televisión, ya que con todas las tecnologías de las que disponemos, no necesitamos papel para viajar a un mundo nuevo, tanto así que algunos de nosotros podemos hacerlo incluso con gafas de realidad virtual. Dicho de otra manera, cuando se habla de leer “El señor de los anillos” y transportarnos a su mundo de fantasía, un niño actual, generalmente se limitaría a ver la trilogía de películas.
A modo de conclusión, quiero expresar mi opinión sobre esta situación. Considero que, a pesar de que las tecnologías son herramientas valiosas, no deben reemplazar la experiencia que ofrece un libro y todo lo que conlleva. Un libro representa aprendizaje, crecimiento y diversión. De aquí en adelante, tengo la intención de fomentar este hábito en mi vida y transmitirlo a mis futuros alumnos.
El texto plantea una reflexión profunda sobre el valor de la lectura en la vida de las personas, especialmente en un mundo que actualmente está saturado de tecnología y pantallas digitales. El texto, refleja como un niño rechaza los libros en su cumpleaños debido a las distracciones digitales, esto es un ejemplo de cómo la lectura puede perder importancia en la vida de las nuevas generaciones.
ResponderEliminarEl autor del texto afirma que la lectura nos puede transportar a mundos imaginarios y enriquecer nuestras vidas al proporcionarnos nuevas perspectivas y experiencias acerca de la vida. El texto nos enseña el poder transformador de la lectura y su capacidad para absorbernos en otros universos durante que disfrutamos de ella.
Además nos sugiere que la lectura puede ser una fuerza muy poderosa que nos salva y nos ayuda a crecer personalmente. Es por ello que nos ayuda a reflexionar sobre nuestro propio hábito de lectura y su importancia en nuestras vidas. La lectura no solo es una actividad placentera, sino también una herramienta poderosa para el crecimiento personal, el desarrollo intelectual y la participación activa en la sociedad.
Es verdad que las nuevas tecnologías, y el uso abusivo de los videojuegos y la televisión, quitan todo el tiempo de los niños y niñas hoy en día. Como futuros maestros tenemos que fomentar la motivación para leer, y que los alumnos quieran leer para aprender, divertirse y conocer.
ResponderEliminarPersonalmente, no soy muy fan de la lectura, pero no es porque prefiero estar con el móvil, ver series o jugar a videojuegos, sino porque me cuesta mucho encontrar libros que me capten l’atención, y una de mis grandes debilidades es la atención y la distracción, no puedo estar más de media hora leyendo porque no hago una lectura profunda y me olvido de que trataba lo que había leído. Pero eso no significa que deje de leer, me gusta leer artículos de educación cortos, ojear guías de montaña y leer el periódico con las noticias del día de hoy.
Sé que la lectura es muy importante para el saber, y creo que es esencial que los niños no dejen de hacerlo, hay que buscar la manera que el leer no sea una forma “aburrida”, porque queremos o no, muchas personas relaciona los libros con una cosa aburrida y sin gracia.
Como se dice en el post del blog, la lectura, es una vía para desenvolver nuestro conocimiento personal y profesional, llegando a reflexionar y pensar sobre lo que leemos. En el contexto escolar, tenemos que encontrar una manera “divertida” para que los alumnos se introduzcan a la lectura. Hoy en día existen mucha diversidad de libros, que pueden captar la atención de la gente, como los libros interactivos, los libro juegos, entre otras muchas versiones.
En conclusión, los libros no son solo una fuente de entretenimiento, sino una ventana de experiencias nuevas, conocimientos y posibilidades.
Los libros han sido y serán, sin duda, la herramienta más poderosa para desarrollar la imaginación en una persona. Tienen la capacidad y la virtud de transportar a una realidad distinta a la nuestra, a mundos inimaginables y construidos por la imaginación de cada uno.
ResponderEliminarEs notable el cambio que ha conllevado la introducción de las nuevas tecnologías en nuestras vidas, y con ello, los libros han pasado a un segundo plano. Nos hemos acomodado a lo fácil, a tener siempre a nuestro alcance una herramienta que nos de todo lo que necesitamos, y se olvidan los beneficios que nos puede llegar a aportar la lectura, el libro.
En lo que a nosotros respecta, como futuros docentes, creo que es muy importante tener en cuenta todos estos aspectos, formarnos en la educación desde la importancia de la lectura y los beneficios que conlleva desde edades tempranas. Desde el acto de involucrarse en el aula, hasta el hecho de hacer consciente a los padres de la necesidad de una buena lectura en casa.
Siempre me acuerdo de mi padre y la ilusión que le hacía verme leer de niña, y su involucración como padre en querer que yo siguiera leyendo, aprendiendo, y teniendo esa curiosidad que siempre se tiene de niño por el mundo fantástico que hay dentro de un libro.
Por tanto, considero que es fundamental inculcar la lectura, pero no desde un punto de vista de tarea u obligación, sino desde una visión enriquecedora, divertida, dinámica y diferente.
Manuel Pérez
ResponderEliminarEste fragmento hace referencia a la importancia de la lectura, ya que esta proporciona, imaginación y reflexión entre otras muchas cosas.
Como se cuenta la pasión por la lectura no se obtiene leyendo sin más, sino que hay que dar con el cuento o la historia que te enganche a seguir leyendo, como fue la trilogía del "Señor de los anillos" para la persona del relato.
Considero que hoy en día la situación alrededor de la lectura es bastante compleja, si bien es cierto que leer cualquier tipo de texto ya sea narrativo, descriptivo, informativo... aporta mucho al lector sea de la edad que sea también considero que tanto para bien como para mal la manera de leer cambia y por tanto la lectura convencional se queda algo desfasada. Yo en mi vida persona debo reconocer que dedico bastante tiempo a los videojuegos y dependiendo del juego que escoja puede ser más enriquecedor o menos. No obstante siempre existe la opción de crear alguna dinámica didáctica alrededor de la tecnología puesto que está misma puede no sólo fomentar la lectura dentro de los videojuegos o alguna aplicación en el movil/tablet, sino que a su vez puede permitir al lector/jugador/alumno desarrollar otras habilidades cognitivas como la toma de decisiones rápidas. Obviamente no considero que deba desaparecer al completo la lectura convencional por micho que los tiempos avances porque también poseen muchos beneficios que no se pueden lograr de otra forma, es por ello que bajo mi punto de vista, encontrando el equilibrio entre lo convencional y lo tecnológico es donde lograremos transmitir a los alumnos la enseñanza en su máximo esplendor.
ResponderEliminarNayara Hernandez
ResponderEliminarEstoy de acuerdo con la importancia que aboga la lectura como una herramienta que va más allá del entretenimiento. También puede ser un medio para la reflexión, la resistencia y la autotransformación igual que enriquecedora para la ortografía y mejoría de la comprensión. Lo que me gusta del blog es que nos invita a reconsiderar cómo abordamos la lectura en nuestra vida cotidiana y en entornos educativos.
En conclusión, los libros no son solo una fuente de entretenimiento, sino una ventana de experiencias nuevas, conocimientos y posibilidades y muchas veces no somos conscientes de todo eso. Con la llegada de las tecnologías hemos ido a lo cómodo, a lo ‘fácil’ que es ‘esperar a la película’ o buscar por internet los resúmenes sin darnos cuenta de todo el contenido que perdemos por ello.
Belen Diaz
ResponderEliminarEste texto aborda el poder transformador de la lectura en la vida de las personas, contrastando la experiencia de un niño que ha perdido interés en los libros debido a la prevalencia de las pantallas, con la experiencia personal de la autora al sumergirse en la trilogía de "El Señor de los Anillos".
Tras leerlo, he reflexionado sobre el impacto que han tenido los libros en mi infancia, y la facilidad que me proporcionaron a la hora de leer y escribir sin ningún tipo de falta de ortografía. Además, siempre fueron una forma de entrar en mi propio mundo y desconectar de todo lo demás.
Por ello, considero que es fundamental que, tanto los tutores como las familias inculquen a sus hijos el hábito de leer, así como el poder de poner a prueba su imaginación y sumergirse en las historias.
Tras la lectura del texto he reflexionado sobre mi relación con los libros y la lectura. Me ha recordado sobre todo a mi época en el instituto donde me hacían leer libros que me eran muy aburridos o simplemente no eran atractivos a mi gusto. Además de la falta de renovación de estos libros siempre eran los mismo agua para chocolate, crónicas de una muerte anunciada, … Hubo una única vez que leí un libro que me encantó, fue en tercero de la ESO donde mi profesora de literatura me dejó escoger el libro que quisiera y más tarde hacer una exposición en donde explicar de qué trata, cómo son sus personajes, etc. Es más recuerdo que muchos profesores comentaban las buenas notas obtenidas después de ser el propio alumnado quien escogiese su libro para el trabajo.
ResponderEliminarNunca he sido lectora, no soy una persona que le guste leer ni que despeje la mente leyendo, esto siempre me ha apenado ya que toda mi familia lee y además muchísimo. En mi casa cada vez que entra un libro nuevo se lo lee mi madre, mis hermanos, tíos y abuelos y luego quedan para compartir qué les pareció, lo que les gustó, etc. Además mi abuelo siempre me ha dicho que leer es viajar y vivir y siempre me hubiese gustado formar parte de esa sensación.
A su vez pienso que la digitalización ha democratizado el acceso al conocimiento y ha transformado la forma en que interactuamos con los libros y la información escrita.
En mi opinión, este artículo aborda de manera acertada la preocupación sobre el hecho de que cada vez se utilizan menos los libros en la época actual, donde las tecnologías llaman la atención de las nuevas generaciones. La experiencia que se comparte resalta la capacidad única que tiene la lectura para transportarnos a diferentes mundos, algo que parece haber sido dejado de lado por las pantallas.
ResponderEliminarEn mi opinión, considero que es muy importante encontrar un equilibrio entre el uso de la tecnología y la lectura tradicional. Si bien las tecnologías nos brindan acceso a una gran cantidad de información, los libros nos ofrecen una profundidad y una conexión emocional que no se pueden reemplazar. En el ámbito educativo, es fundamental adaptar los métodos de enseñanza para captar el interés de los estudiantes, reconociendo que la lectura no solo es una herramienta académica, sino también una forma de abrir las puertas de la imaginación y la reflexión personal.
Estoy muy de acuerdo con este post. Como aficionada a la lectura desde mi infancia, he sido víctima de esa digitalización de la lectura a lo largo de mi etapa educativa.
ResponderEliminarSe ve claramente la diferencia en la forma de abordar la lectura hoy en día en la escuela. Antes seguíamos con el dedito cada letra que íbamos leyendo en lugar de mirar a una pantalla, y pasábamos páginas físicas, no solo hacer scroll con el dedo.
En las escuelas, bajo mi observación, no se ve que trabajen diariamente la lectura o que se fomente como interés personal. Más bien, se limita a un libro obligatorio impuesto por el docente.
Es increíble como a día de hoy en la universidad, la mayoría de recursos que utilizamos son textos y artículos digitales. Entiendo la importancia de no explotar el medioambiente, y tener conciencia con el uso del papel. Pero nada se te queda más grabado que lo que lees en papel físico.
Ismael Zapata García:
ResponderEliminarEl texto nos lleva a la reflexión de cómo con la edad “nos quitan” por una parte la ilusión por leer, o a eso ha llegado mi reflexión. El otro día vi un vídeo de una psicóloga hablando del tema, y es que en el colegio nos obligan a leer, que leamos X libro, nos obligan a la lectura, y el niño pierde ese amor por leer, porque le obligan, porque cuando te obligan a algo es cuando nos quitan las ganas. El niño sí quiere leer, pero es la obligatoriedad lo que le quita la ilusión de leer. Aparte el hábito lector y el amor por la lectura también hay que trabajarla día a día, en la asignatura de Didáctica de la Lengua que disfruté el año pasado, nos dieron varias herramientas a llevar a cabo y que no conlleva una obligatoriedad detrás hacia el niño. Por otro lado está el tema de la tecnología, que ya está implantado en nuestras vidas, pero eso no quita que las personas le podamos dedicar tiempo a la lectura. Si desde pequeños se ha trabajado ese hábito lector se puede disfrutar del mismo modo de los dos mundos: la lectura y los audiovisuales. Ejemplo claro puede ser mi caso, le puedo dedicar una hora de mi tiempo a leer y después disfrutar otra hora de una serie, o leer un libro de poesía y después escuchar un podcast de poesía, los dos mundos pueden convivir perfectamente sin que uno se coma a otro, pero eso hay que trabajarlo desde la educación en las aulas y en las casas.
Estoy de acuerdo con su post Lidia, y me pongo como ejemplo, ya que soy una persona que no lee libros por que mi ocio y entretenimiento se van por otros ámbitos de la vida. Sin embargo, estoy de acuerdo en el que me gustaría coger el hábito de leer que tenía cuando era pequeño, ya que me enriquecen de conocimiento y sabiduría.
ResponderEliminarTras adentrarme a leer este relato, comparto la perspectiva de la autora, Noemí Rosquete Lorenzo. El testimonio del niño que en su cumpleaños, le pide a su madrina que no le regale libros, refleja perfectamente la realidad actual donde las pantallas digitales han tejido una especie de telaraña que atrapa el tiempo de ocio, pasando la lectura a un segundo plano.
ResponderEliminarEl poder transformador de la lectura, tal y como nos dice la autora, se refleja en su propia experiencia con la trilogía de "El Señor de los Anillos". La capacidad de adentrarse en mundos ficticios o reales, viviendo por un rato con los hobbits, elfos y demás personajes, destaca la riqueza que la lectura aporta a nuestras vidas.