“Un niño, un profesor, un libro y un lápiz pueden cambiar el mundo”
Esta frase de Malala Yousafzai, extraída de su libro
“Yo soy Malala”, muestra la gran fuerza espiritual de una niña sabia víctima
del extremismo y la intolerancia. El Secretario General de la ONU , Ban Ki-Moon, a raíz del atentado
perpetrado contra Malala señaló a los medios de comunicación: “los extremistas han demostrado qué es lo que
más temen: a una niña con un libro”.
En otro post,
titulado ¡No me regales un libro!,
reflexionaba sobre el poco aprecio que, en general, el alumnado de nuestras
sociedades avanzadas le tiene al libro. Un recurso bastante apreciado, sin
embargo, en otras latitudes donde los libros escasean y se tiene que recurrir a
experiencias como el “Biblioburro” para que los libros lleguen al alumnado más desfavorecido.
En el primer mundo los niños y niñas tienen muchas
cosas y no saben apreciarlas; un buen libro es una joya que puede servir de “alimento
espiritual”. Los educadores del siglo XXI han de comprender que es importante
que el alumnado nutra su fuerza
espiritual; será esa fuerza espiritual la que les va a permitir sortear los reveses
de la vida y tolerar la frustración sin responder de manera agresiva (como
ocurre con frecuencia en la escuela y en el hogar con niños exigentes y caprichosos,
que no saben apreciar lo que tienen).
Un ejemplo del poder de la lectura lo tenemos en el
relato de Nelson Mandela. Él ha contado como el poema “Invictus” de William
Ernest Henley, escrito en una hoja de papel, le ayudó a sobrellevar sus 40 años
de encarcelamiento.
Más allá de la noche que me cubre,
negra, como el abismo insondable,
doy gracias al Dios que fuere
por mi alma invicta.
En las azorosas garras de las circunstancias
nunca he gemido, ni llorado.
Sometido a los golpes del destino,
si bien he sangrado, jamás me he postrado.
Más allá de este lugar de ira y llantos
donde yace el horror de la sombra,
la amenaza de los años,
me encuentra y me encontrará, sin miedo.
Ya no importa cuan estrecho sea el camino,
ni cuantos castigos lleve a la espalda:
Soy el amo de mi destino, soy el capitán de mi alma.
Qué hermosa manera de cerrar el poema: “Soy el amo de
mi destino, soy el capitán de mi alma”. Pero los niños y las niñas sólo podrán
ser los amos de su destino o los capitanes de su alma si desde la familia y el
sistema educativo se les da las herramientas adecuadas para alimentar su fuerza
espiritual; con ella podrán responder a las vicisitudes vitales con resolución
y valentía.
Silvia Delgado Arastell
ResponderEliminarLa lectura tiene multitud de beneficios para las personas:
- Adquisición de nuevo vocabulario.
- Evadirte de tu día a día y de tus preocupaciones. Relajación y calma tras un día de trabajo estresante y agobiante.
- Inspiración para conseguir nuevos proyectos de vida y metas.
- Identificarte con personajes que están pasando por la misma situación que tú y que te dan consejos de como superar esa situación-
- Capacidad crítica y oratoria.
- Viajar a nuevos lugares desde la mente. Imaginación
- Aislarte de los problemas del mundo por unas horas.
- Multitud de géneros literarios que se adaptan a la personalidad y gustos de cada persona.
- Inspirarte en personajes que te dan la fuerza necesaria para afrontar los problemas diarios.
- Adquirir nuevos valores.
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ResponderEliminarTras leer este post y quedárseme marcadas las palabras “fuerza espiritual” me he preguntado, ¿vivimos en una sociedad dónde estamos perdiendo los valores morales?
ResponderEliminarLos seres humanos desde que nacemos, vamos interiorizando y haciendo nuestros los valores morales que se nos enseñan en la familia y en la escuela, tales como el respeto, la empatía, la generosidad, la responsabilidad, etcétera. Sin embargo, actualmente parece que este proceso se ha estancado y con ello llegamos a la perdida de los valores morales. Pero, ¿realmente se están perdiendo estos valores o están siendo sustituidos por otros? Creo que la respuesta acertada es la segunda opción. Todo ello se debe a que la sociedad del siglo XXI se está transformando y, con ello los valores, que se basan principalmente, en el individualismo, materialismo, consumismo y la competitividad, pero ¿por qué no hacer nada para cambiar esta situación? Porque actualmente nos encontramos en una sociedad conformista incrementada por el adoctrinamiento que recibimos de forma permanente a través de los medios de comunicación que pretenden imponer un pensamiento único, lo que hace que nos estemos convirtiendo en una sociedad vulgarizada, conformista y fácil de manipular. Para ello necesitamos de la educación, es decir, hay que fomentar el pensamiento crítico y sólo así podremos cambiar por lo que, coincido con Lidia y creo que un niño, un profesor, un libro y un lápiz pueden cambiar el mundo.
Por otro lado, haciendo referencia al poema escrito en este post, me fascina la última frase con la que estoy totalmente de acuerdo y la relaciono con todo lo dicho anteriormente, es decir, nosotros y nosotras tenemos que poner esas ganas y actitudes para convertirnos en mejores personas y tener el deseo de cambiar nuestro pensamiento y nuestro camino, para que nadie, ningún medio de comunicación; red social; presidentes/as; etcétera, nos manipulen ni guíen nuestro propio destino, ya que, como bien dice el poema, somos los amos de nuestro destino y los capitanes de nuestras almas.
Natalia Reyes González.
En modo de reflexión, este texto da a entender que la educación no se valora por igual en este planeta. Podemos observar como en los países más pobres los niños y las niñas sin recursos algunos, quieren y desean aprender, donde con tan solo con poder tener un libro, ya son felices y están agradecidos de poder contar con ello. En cambio, vemos la otra cara de la moneda, países donde hay riqueza, donde los niños y niñas se pueden permitir todos los libros que quieran, pero en cambio no los valoran, no les hacen caso, ni les interesa. La consecuencia es la poca educación y valoración que hay en nuestra sociedad, donde hay personas que por poder tener un libro son ricos en conocimiento y después está el rico, que puede tener una biblioteca en casa y no valora dicho conocimiento y enriquecimiento. Por tanto, desde mi punto de vista, creo que esta diferencia va dependiendo de donde te has criado, como has crecido, la familia, la sociedad y la economía que te rodea, son factores claves para que se pueda valorar. Porque no hace falta valorar y ser pobre, también se puede ser rico y valorar, pero va inculcado en como creces y en tu educación. Por consiguiente, siempre hay que estar agradecido por lo que tenemos y yo personalmente, me siento afortunado de poder seguir estudiando ya que mis padres no pudieron y el esfuerzos de ellos para que yo siga, es la fuerza, valoración y humildad que tengo para seguir adelante.
ResponderEliminarMarco Antonio Hernández Rodríguez
Podemos ver en este texto el valor de la educación desde varias perspectivas. Y como se considera importante también una educación espiritual, de confianza para que el niño y la niña en el futura tenga las herramientas necesarias para ser capaz de convivir en la vida diaria con el resto de personas.
ResponderEliminarDesde la educación ámbito en el que nos estamos formando encontramos al catedrático de didáctica y organización escolar Javier Marrero en su lección inaugural para la Universidad de La Laguna, que nos habla de que tiene que haber un cambio en la educación, tanto en su curriculum, como en sus contenidos, el profesorado...dejando ver que debemos adaptarnos a los nuevos tiempos. Y ellos piden una formación mas creativa, feminista, psicosocial...
Como reflexión personal considero que la escuela debería tener una implicación mas grande en cuanto a esa "fuerza espiritual", forma a los mas pequeños en las emociones, gestionarlas, conocerlas...pues en el siglo que vivimos saber cuando Colón descubrió América se sabe en un tiempo récord, todo depende de la velocidad de internet que tenga cada uno. En cambio, una emoción o un sentimiento mal reconocido o gestionado puede dificultar una vida diaria "normal"
Sara Elisabet Martín Calderón. Estudiante de Pedagogía (4º)
Podemos observar en el texto desde varios ángulos l valor de la educación, y como es importante también una educción espiritual, dándole confianza al niño o la niña para que tenga un futuro las herramientas necesarias para convivir el día a día con las demás personas.
ResponderEliminarHaciendo referencia al poema, me encanta la última frase en la que estoy de acuerdo, ya que nosotros y nosotras tenemos que poner ganas y actitud para llegara ser mejores personas y cambiar nuestro pensamiento y nuestro camino.
Formamos parte de una sociedad, en la que la manera en cómo hemos vivido nuestra historia ha marcado la forma en cómo se ha desarrollado la vida en la sociedad actual.
ResponderEliminarLas familias del denominado “primer mundo” conviven en la “sociedad de la inmediatez”. El éxito se ha convertido en la forma de cubrir las necesidades de los niños y las niñas, ignorando el valor del trayecto hasta llegar a él. Esto genera la no confrontación con el sentimiento de frustración cuando no se obtiene el objetivo de manera inmediata sin esperar o esforzarse para conseguirlos.
Se remarca que siempre habrá una manera sencilla de alcanzar el objetivo, lo que en mi casa lo llamarían la “ley del mínimo esfuerzo”.
Se genera, bajo mi punto de vista, una “falsa felicidad del logro” en la niña o el niño. Esto se produce, en muchos casos, por la incapacidad de las familias de enfrentar los sentimientos de frustración de no cubrir los deseos de las niñas y los niños.
Y evitar que la familia cubra todos los deseos de la niña o el niño y así evitar que lidie con su propia frustración. Desembocando en algunos casos en personalidades violentas o depresivas al ser adultos. Ya que no han aprendido a recorrer el camino, sino a llegar a la meta. Y no siempre se llega a la meta. De ahí la importancia de la frustración que te hace ver que hay otros caminos para llegar a la meta o te crea metas diferentes a alcanzar. Y aprender que no conseguir la meta tampoco es fracasar.
Considero que en nuestra sociedad no se valora el acceso libre a la información. En contrapunto están los que no tienen acceso a la información, los que las lleva a analizar y a considerar un valioso regalo el acceso a esta.
Tenemos la gran suerte, de poseer un gran archivo sobre nuestra historia y actualidad, ya no solo en formato libro o papel, sino también lo podemos encontrar de manera digital, online, audiovisual, etcétera.
El desarrollo de las nuevas tecnologías ha generado un cambio gigantesco en nuestra manera de ver la vida y ha hecho una remodelación estructural de la sociedad en la que convivimos. Los niños y niñas son un reflejo de ello, se han convertido en fervientes seguidores de la "ley del mínimo esfuerzo", por supuesto no en todos los casos. Aún hoy podemos encontrar niños y niñas que devoran con verdadera ansiedad cualquier tipo de libro, y familias que los guían para que aprendan la importancia de contrastar las informaciones que se les presentan en este mundo lleno de "fakenews" creándose como personas críticas, mejorando así un futuro que parece incierto.
Maite León Martín.
Después de leer este post, considero que la educación es la única herramienta capaz de transformar la vida de los niños y niñas, además de potenciar el desarrollo de las sociedades en las que viven. Asimismo, se incrementa su autonomía y su confianza y con lo cual obtienen una mayor libertad para tomar decisiones. Por tanto, en este mundo de violencia e injusticia, es fundamental empoderar a las/los jóvenes como parte de nuestro presente y futuro. Entonces, ¿Cuál es nuestra función como pedagogas y pedagogos? transmitir una educación en valores, responsabilidad e igualdad para romper este círculo vicioso; pues la educación es el instrumento más poderoso para acceder a todos sus derechos y alcanzar la igualdad.
ResponderEliminarLaura Yanes Rodríguez
Tras leer este post, también considero que un libro es un recurso educativo fundamental, pues permite que las niñas y los niños adquieran conocimiento y cultura para entender el mundo y todo lo que les rodea. Además, les puede ayudar a ejercitar su cerebro. Al leer, tienen que ver con su mente lo que el autor les cuenta. En cierta medida, están creando un mundo propio y desarrollando múltiples mecanismos, es decir, da alas a su inspiración e imaginación. También, se ha de tener en cuenta que un libro les provoca inquietudes e intereses, les hace pensar y rebelarse. Por tanto, les está ayudando a comprenderse mejor a ellos/ellas mismos/as.
EliminarLaura Yanes Rodríguez
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ResponderEliminarTras leer este post, considero que la mayoría de las personas del primer mundo o también denominadas "sociedades de desarrollo" o "sociedades de la información" no son conscientes de los "privilegios" que tenemos en estos tipos de sociedades, cuando digo privilegios me refiero a todo lo que tenemos en nuestras manos y no nos interesa o no nos quiere interesar. ¿Realmente somos conscientes de todo lo que tenemos? . La educación es la base principal para informar y transformar esas ideas tan desinteresadas por ideas más motivadoras, la función de orientar ayuda a empatizar con el alumnado y transmitirle los valores morales y los instrumentos para realizar un buen proceso de aprendizaje.
ResponderEliminarPor otro lado, los libros te ofrecen un amplio abanico que te ayudan y te sirven para formarte, para conocer, indagar, aprender a escribir, a leer, a tener conocimientos de gramática, te ayudan a cometer errores ortográficos. Por ello creo que el que tiene un "libro es como tener un tesoro" y que cuanto más leas, te enriqueces como persona y como profesional. "El saber no ocupa lugar" y una de las mejores herramientas son los libros, ya sean en formato papel como digital (aunque me declino más por los que están en papel).
"La fuerza espiritual" se nutrirá más y mejor cuanto más consultes libros y otros instrumentos de información.
Andrea Betsabé Díaz Herrera
Después de leer este post, se puede observar como la educación no llega de la misma manera a todo el mundo, es triste saber que hay niños y niñas que quieren formarse de verdad y no pueden llegar a tener todos los recursos necesarios y por otro lado, como puede ser este país, se supone que se tiene el derecho a la educación y muchas personas no lo valoran, es curioso, ¿verdad?, creo que hasta que no lo pierdes no te das cuenta de la gran oportunidad que tenemos de recibir una buena educación, de poder salir de tu casa y acudir a la biblioteca más cercana y enriquecerte de conocimiento con todos los libros que quieras sin tener que pagar nada o sin tener que esconderte de nadie y por lo contrario no en todos los sitios se tiene esa oportunidad.
ResponderEliminarComo reflexión de este post considero que debemos de valorar más la educación que tenemos y las oportunidades que se nos ofrecen y pensar que somos unos/as afortunados/as por la educación que hemos recibido.
Andamara Amador Marrero
Mª Cristina Castro Cabrera
ResponderEliminarTras haber leído el post cabe destacar que se señala la diferencia de la importancia que se le da a la educación dependiendo del desarrollo del país. Es curioso que quien más tiene no lo aprecie, y que lo poco que pueden tener otros lo vean como un tesoro. Porque la educación es eso, un tesoro que hay que seguir cuidado y del que hay que seguir aprendiendo.
En el post también se comenta que los extremistas temen a una niña con un libro, también destacaría que en la actualidad esta situación se sigue produciendo, y no hablo solo de los países del tercer mundo, sino también de los grandes países industrializados, pues se puede observar cómo se le da tan poca importancia a la educación y escasos recursos o modificaciones eficaces y eficientes que sí puedan producir su mejora. Quizá no sea la única causa, pero es normal que las personas que gobiernan los países no quieran a un pueblo culto, porque un pueblo culto podrá empezar a ver con claridad cómo se deben hacer las cosas y no será tan "manejable".
ResponderEliminarLa escritura ha sido un eje fundamental de las más grandes civilizaciones, si nos remontamos a una de las escrituras más antiguas, encontramos los jeroglíficos un sistema de signos gráficos que utilizaban en el antiguo Egipto, principalmente se utilizaban con un fin religioso en los distintos templos y tumbas, aunque también se utilizaban en los papiros. En cuanto a las primeras escrituras alfabéticas, encontramos la escritura fenicia, un sistema consonántico, que fue uno de los más utilizados debido a la difusión que obtuvo gracias a los mercaderes que fueron trasladándolo en sus viajes consiguiendo que fuera transformada poco a poco, un ejemplo de ello es la introducción de las vocales por parte de los griegos.
La transmisión del conocimiento de manera escrita fue un gran avance que permitió a la sociedad a desarrollarse hasta donde estamos hoy en día, aunque en un principio estos conocimientos o contenidos eran otorgados únicamente a una parte de la población, principalmente a los hombres de familias ricas o a las personas pertenecientes al clero, lentamente y con el tiempo se consiguió que cualquier hombre pudiera acceder a ella, no fue hasta mucho después que la escritura o el conocimiento estuvo al alcance de mujeres y hombres de cualquier clase social, o al menos en los países desarrollados.
Hoy en día, todavía una gran cantidad de personas no reciben la educación necesaria, permitiendo así que continúen las relaciones de opresores y oprimidos, el heteropatriarcado, el racismo, la xenofobia, son un ejemplo de ello. Malala es un gran ejemplo de ello, una niña que simplemente por su deseo de estudiar consiguió llegar a donde está hoy y ser un referente para una gran parte del mundo.
En este post se menciona que el alumnado de sociedades avanzadas no valora tanto los libros como el alumnado de sociedades donde los libros no son un recurso tan común ni son tan fáciles de conseguir, si bien es cierta esa afirmación, también debemos tener en cuenta la educación que esos niños y niñas reciben en sus casas, pues, el amor y pasión por los libros empieza desde casa. Los niños y niñas aprenden con el ejemplo y la observación, por lo que si en su entorno cercano observan que los adultos leen y se interesan por los libros, es muy probable que ellos sientan la misma curiosidad.
ResponderEliminarDesde la escuela también se debe educar en el amor, pasión y respeto por los libros, no solo por la gran ayuda que son a la hora de mejorar tanto las faltas de ortografía y la capacidad de redacción, sino porque son una distracción y pasatiempo sano, donde también podemos aprender valores importantes para la vida.
Los libros son una manera de refugiarte y de evadirte de la realidad, de visitar otros mundos sin salir de tu propia habitación. Tienen ese poder y esa magia de ser tan maravillosos como para conseguir que todo lo que está a tu alrededor desaparezca y tú, como lector, te sumerjas tanto en sus páginas que casi puedas sentir como caminas por las calles del libro que lees. Quizá eso fue lo que le pasó a Nelson Mandela con el poema de William Ernest Henley, que cada vez que lo leía se sumergía en sus palabras y se evadía del lugar donde se encontraba realmente.
Miriam Lorenzo Rodríguez.
No somos conscientes de la cantidad de herramientas que nos ofrece la lectura para el posterior uso en la vida real, es decir, herramientas que nos ayuden a crecer y mejorar como personas. La lectura mejora la empatía de las personas ya que nos muestra los pensamientos y sentimientos de los personajes, estimula nuestro cerebro y lo mantiene en forma, nos ayuda a relajarnos y descansar, etc. Son muchas las herramientas que nos brinda la lectura, pero, por desgracia, cada vez son menos las personas que leen.
ResponderEliminarBajo mi punto de vista, existen varias causas. Por un lado, la culpa la tiene el mundo tan digitalizado en el que vivimos, el cual nos ha hecho olvidar el tacto y el olor de un libro, la sensación de calma y paz que te da al sumergirte en él. Actualmente los canales de comunicación, las redes sociales, etc. priman. Y, respecto a esto, tiene mucho que ver la política del país. El tipo de política existente en nuestro país es otra de las causas que provoca la escasez de la lectura, ésta no apuesta verdaderamente por la educación.
Otro dato relevante es el aún existente analfabetismo, son más de 700 millones de personas las que no saben leer ni escribir. Se podría decir, y afirmar, que aquellas políticas que no apuestan por la educación es porque no les interesa tener ciudadanos formados, conscientes de su consumo, de la importancia que tiene su voz, de los derechos que poseen y del tipo de sociedad en la que viven. Son conscientes de que, como bien indica el título de este post, “un niño, un profesor, un libro y un lápiz pueden cambiar el mundo”.
Carla González Afonso
Resulta realmente impactante como muchas niñas del mundo se ven amenazadas por el simple deseo de aprender, conocer, progresar. Malala Yousafzai nos demuestra con su lucha por el derecho a la educación que, a pesar de las dificultades, y los obstáculos que se puedan presentar en nuestras vidas, no podemos permitir que eso nos impida seguir nuestros sueños y lograr las metas que nos hemos propuesto alcanzar en el futuro.
ResponderEliminarActualmente, nos vemos inmersos en un mundo digitalizado, donde nos precipitamos hacia la inmediatez, sin valorar y apreciar otros recursos que nos pueden enriquecer, en gran medida, de conocimientos, saberes, valores, principios, etc., como puede hacer un libro.
Es bastante notable como el valor de un libro depende de la sociedad en la que nos situemos. Para muchos puede ser una herramienta de estudio, pero otros pueden significar la llave para su libertad “espiritual”, como bien se explica en el post. Una oportunidad para cambiar, mejorar, emprender e incluso sobrevivir a las adversidades que nos presenta la vida como podemos apreciar en el relato de Nelson Mandela.
Es necesario que esta concepción de lo que representa un libro sea inculcada a través del sistema educativo, ya que sólo así podemos dar el reconocimiento merecido que tiene la educación para la sociedad en la que vivimos.
Elizabeth Martín Izquierdo.
El caso de Malala Yousafzai a las personas de occidentes nos puede parecer una autentica atrocidad, pero por desgracia estas crueldades hacia las mujeres siguen existiendo en países tercermundistas.
ResponderEliminarRealmente no somos consientes como las nuevas tecnologías han hecho que los estudiantes olvidemos la importancia que tiene la lectura, por esto los buenos docentes tienen que potenciar estos hábitos para que el alumnado entienda que no un libro puede ser mucho más que una simple herramienta de estudios.
Por lo tanto, pienso que la educación varia mucho en función de la economía y al desarrollo del país en el que se encuentra dicho centro educativo, por eso creo que es fundamental que los docentes de occidente dejen un poco de lado las nuevas tecnologías y puedan trasmitir el amor y el ocio que nos puede proporcionar un simple libro. Además de señalar la importancia que tiene la lectura y lo verdaderamente útil que es para ser una persona culta.
Por último, me gustaría señalar la frase del poema " Soy el amo de mi destino, soy el capitán de mi alma" ya que pienso que realmente somos nosotros mismos los que tenemos que tener un pensamiento critico sobre cualquier tema, y así convertirnos, en los dueños de nuestras vidas y poder defender, pese a las adversidades y criticas, nuestro pensamiento como hizo Malala Yousafzai.
Cristian Machín Martínez
Desde mi punto de vista, está muy bien la frase que expone Malala, pero creo que habría que fijarse en el cambio que quiere proponer el primer eslabón de la cadena que considero que es el profesor. Si el docente tiene unos ideales y unos valores positivos para inculcar en el alumno o alumna, este proceso de cambio se dará de forma satisfactoria y exitosa. Por su parte, con un libro y un lápiz se puede dar rienda suelta a la creatividad y a la imaginación tanto de los niños y niñas como de los adultos.
ResponderEliminarPor otro lado, como futuros docentes, creo que nos tendríamos que aprovechar de las utilidades y las facilidades de las nuevas tecnologías, pero sin dejar de lado el uso de los libros ya que sus potencialidades educativas han sido y son fundamentales a día de hoy.
Para cerrar la reflexión, me parece muy importante que las familias y el sistema educativo ayuden a los niños y niñas a encontrar su vocación y a que sean los verdaderos amos de su destino.
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ResponderEliminarTras la lectura de este post, quiero destacar la importancia que tiene un libro , sobre todo en el ámbito educativo ya que este te aporta beneficios en el desarrollo de habilidades y destrezas con relación a los contenidos en él aula o en la vida misma ya que la lectura representa un medio para el aprendizaje, el desarrollo de la inteligencia y la adquisición de cultura para la vida. Asimismo, se muestra necesario que la acción educativa centre su atención en promover la lectura como una herramienta necesaria para el ser humano, dado que es vital para obtener conocimientos y desenvolverse en la sociedad y que además es una herramienta útil para el desarrollo personal.
ResponderEliminarCabe destacar, que los libros ayudan a controlar las emociones , a evadirte de cualquier problema y asimismo implica la reflexión sobre hechos acontecidos tiempo atrás.
Hoy en día, no todo el mundo suele apreciar lo que tiene y lo que la vida misma les da , un claro ejemplo , son los libros , los cuales se les debe de dar más importancia y no solo eso , si no que hay que vivir el presente y dar importancia a lo que se nos pone de antemano .
Por tanto, para hacer más eficaz el proceso de la lectura, es preciso transformar las prácticas pedagógicas, es decir, que leer, se convierte en una rutina donde el maestro y el alumnado participen de forma activa involucrándose en el contenido, de manera que escriban su opinión sobre este para poderlo comprender.
Después de haber leído este post me he dado cuenta de que desgraciadamente las clases sociales hoy en día siguen condicionando la educación, aún estando en pleno siglo XXI.
ResponderEliminarDesde mi punto de vista, creo que a pesar de que la educación cada vez es más accesible, la calidad de esta puede variar mucho en función del nivel económico de una familia.
Es decir, incluso en países como España, en los que cualquier niño/a puede estudiar de forma gratuita hasta la enseñanza secundaria, existen una infinidad de diferencias entre los centros privados, concertados y públicos.
Esto es algo que me produce confusión y rechazo. Considero que cualquier alumno/a debería recibir la mejor educación que exista, sin que el colegio en el que esté lo condicione.
Por otro lado, también considero que la enseñanza que el alumnado recibe a día de hoy muchas veces carece de conexión con su entorno y su realidad. Por ello, muchas veces esta resulta ser abstracta y totalmente ajena al alumnado. Esto desemboca en un rechazo a la educación, viendo esta como un castigo.
Como bien dice el post, esto es algo que ocurre en los países del primer mundo, ya que en estos todos los niños/as tienen derecho a la enseñanza, por lo que no saben apreciarla. Sin embargo, también considero que gracias a este descontento ante la educación esta se propone evolucionar y mejorar.
Así mismo, pienso que la educación, como bien dice la ONU, debería ser un derecho básico para cualquier persona. Sin embargo, desgraciadamente la economía siempre está presente para condicionar a las personas, ya que vivimos en una sociedad en la que el dinero está por encima de los valores del ser humano.
Además, a esto se le suma el machismo que aún existe en muchos países, en los que la educación para las niñas sigue produciendo rechazo e intolerancia.
En definitiva, considero que el único enemigo de las personas son las personas. La sociedad ha avanzado mucho en el ámbito educativo, pero aún quedan muchas cosas por cambiar y reivindicar. Es muy injusto que las decisiones de una sociedad machista u oprimida las tengan que pagar o sufrir niños/as totalmente inocentes.
Gisela Flores Bartolomé
Los libros, cada vez más, están siendo relegados a un segundo o incluso tercer plano. Esto no ocurre desde hace un par de años atrás, es algo que fue ocurriendo de manera paulatina, hasta que las tecnologías pasaron por una etapa vertiginosa, lo cual cambió de manera drástica las necesidades y codicias de las personas.
ResponderEliminarUnas generaciones atrás, el hecho de poder leer era un lujo y eran los carteros quienes solían leer o escribir las cartas a las personas que no podían hacerlo por sus propios medios y no hablo de que hayan pasado 2 siglos ni mucho menos, estos hechos rondaban la época del 1900. Cuando el hermano de mi abuela se graduó en la facultad de educación, su primer trabajo fue en la campaña de alfabetización y varias veces me contó que todas esas personas a las que él enseñaba tanto a leer como a escribir veían esto como un regalo, ya que era algo que sus padres no pudieron hacer, y le agradecían mucho su labor. Esto supuso un gran avance a nivel social y cultural.
A día de hoy, aprender a leer y a escribir (por lo menos en España) es un derecho de cada niño y persona, y ver o conocer a alguien que no sea capaz de hacerlo es muy poco común, por lo que, en general, las personas de hoy en día tenemos muy naturalizado poder leer; mientras, en otros países como pueden ser los gobernados por régimen talibán no han logrado todavía esta realidad, lo cual consterna al resto de naciones.
Debido a las tecnologías, los hábitos de lectura han ido en declive ya que se han reemplazado por ordenadores, televisiones y teléfonos móviles; esto lo podemos ver por ejemplo en las casas actuales que ya no necesitan tener una enciclopedia para poder buscar información, o al buscar entretenimiento ya no se suelen leer tantos libros de ficción, romance… ya que han sido “reemplazados” por las series y películas…
Aún teniendo todos estos artefactos pienso que es muy importante mantener o incluso aumentar el hábito lector y no sólo mediante el uso de libros de texto en el colegio sino mirando un poco más allá, ya que aparte de conseguir conocimientos, leyendo también podemos aumentar nuestra creatividad e imaginación y aprender grandes lecciones para la vida.
Cada vez llaman más a las puertas (o mejor dicho se oye hablar más) sobre las enfermedades mentales como la ansiedad, la depresión o trastornos límites de la personalidad… Además, nosotros como docentes somos conscientes de que bastantes alumnos sufren bullying tanto dentro como fuera de la escuela, ya sea en la red o en la vida real; también conocemos que muchos de nuestros futuros alumnos pueden pasar por situaciones difíciles en la vida ya sean pérdidas, enfermedades, complicadas situaciones familiares… Y pensarán ¿esto a qué viene? Pues viene a que hay una gran cantidad de libros que se basan en estas temáticas (por ejemplo libros como “Invisible” de Eloy Moreno, “Mis ganas ganan” de Elena Huelva o algunos libros de Albert Espinosa) y pretenden guiar, motivar o ayudar a los lectores que pasen por estas situaciones (aunque sea al no sentirse solos) y pueden fomentar la resiliencia y la superación. Esto es sumamente importante, debemos hacer que el alumnado vea los libros no únicamente como conductor de un conocimiento meramente teórico, sino como una manera de aprender sobre la vida y entretenerse (ya que primero deberemos hacer que el alumnado le coja el gusto a la lectura).
A modo de cierre, me gustaría decir que los libros son el recurso más fácil y completo para llegar a una conclusión que tal vez solos no podríamos haber conseguido, ya que suele estar mejor narrado que una película y suele tener más puntos de vista, por lo que en un momento difícil donde por ti mismo no encuentras una salida, el autor del libro te la puede dar de manera subliminal; y, como dijo Arthur Schopenhauer “Leer es equivalente a pensar con la cabeza de otra persona en lugar de con la propia”.
Ariadna Pérez Felipe.
Se ha demostrado científicamente que la lectura puede proporcionarnos numerosos beneficios. Sin embargo, existe la realidad innegable de que los libros son apreciados de maneras muy diferentes en función del tipo de sociedad en el que nos encontremos. Los habitantes de los países considerados desarrollados, en ocasiones, rechazan y desprecian los libros mientras que, en aquellos en desarrollo estos se atesoran.
ResponderEliminarQuienes nos estamos preparando para desarrollar una función docente y los que ya la ejercen, debemos reflexionar acerca de la visión que tienen los niños y las niñas, no solo de nuestro entorno más inmediato, sino del mundo en general, acerca de los libros y la lectura. Además, es interesante cuestionarse por qué hay opiniones tan dispares entre unas regiones y otras del mundo.
En las sociedades avanzadas, los niños y las niñas no saben reconocer ni apreciar el valor que tiene un libro. Esto puede deberse al contexto presente, en el que lo tecnológico prima sobre todo lo demás; las pantallas parecen ser mucho más atractivas que una hoja de papel con letras e ilustraciones. Además, adquiere una función importante la visión que tengan los padres del menor sobre este recurso. Muchas veces la idea que tenemos de los libros es que están meramente para estudiar los contenidos que damos en la escuela. Por otra parte, los libros no son un recurso escaso, de hecho, es algo que puedes encontrar con bastante facilidad. Creo que cuando esto sucede, es decir, cuando algo es fácil de alcanzar, no se le da el valor que probablemente merece.
Por otra parte, en las sociedades menos avanzadas, los niños y las niñas no tienen tantos recursos como nosotros y tampoco están tan inmersos en las Redes Sociales, por ejemplo. Los libros son un recurso de difícil acceso y esto, sumado a la satisfacción que les aporta el leer una historia o aprender algo nuevo -a través de la lectura-, dota a este material de valor.
Desde mi punto de vista, lo más importante de esta reflexión es meditar sobre la visión que tenemos nosotros mismos sobre los libros y qué opinión queremos que tengan los niños y las niñas de nuestras sociedades sobre los mismos. Además, pensar qué podemos hacer para lograrlo, al menos en el entorno sobre el que más fácilmente podemos tomar acción, aquel centro en el que trabajemos, por ejemplo, y cómo vamos a conseguirlo.
En definitiva, el valor del que se les dota a los libros varía entre sociedades. En los países desarrollados, en los que, precisamente, un libro es un recurso de fácil acceso, son poco estimados. Sin embargo, en países en desarrollo donde, en ocasiones, es un reto hacerse con un libro, estos son auténticos regalos. Si queremos conseguir que la visión que tienen los primeros sea similar a la de los segundos, debemos pensar en pequeñas acciones que podemos desarrollar en nuestro día a día en el desempeño de nuestra labor docente. Esto, aunque pueda llegar a ser una tarea compleja, puede iniciarse por algo tan sencillo como presentar un libro -que presente una temática interesante para esos niños y niñas que lo reciban- de una manera atractiva para ellos y ellas.
Alba García Castillo.
Este post te da a pensar en numerosas situaciones de hoy en día y es que la principal dificultad de la sociedad es que no sabemos apreciar el valor de la educación. Partimos de una base en que no todos los niños ni las niñas llegan a potenciar su fuerza espiritual y ahí es donde se encuentra el gran problema. Son muchos los niños y niñas que no saben apreciar lo que tienen, tan simple como un libro, en el que se pueden desarrollar multitudes de habilidades, competencias y actitudes positivas tanto de forma personal como académica enriqueciéndose poco a poco hasta lograr a desarrollar aquellos valores morales tan simples y a la vez tan imprescindibles en la sociedad como el respeto, la empatía, el compromiso, la valoración, la conciencia, etc.
ResponderEliminarConsidero que la familia y la escuela forman parte de la experiencia diaria e influyen mucho en la adquisición de estos valores, pues si provienes de una familia que no te inculcan dichos valores, pero en la escuela si los desarrollas, el niño o la niña no es capaz de entender cuál de los dos contextos tendrá la razón, siempre tenderán a hacer o a comportarse de aquella forma que se comportan en casa. Por ello, es muy importante que el centro educativo comparta las nociones básicas a las familias, para así poder establecer un vínculo estrecho para el trabajo del desarrollo interno del niño o niña (dos mundos llamados a trabajar en común).
Además, me gustaría destacar que uno de los factores que también ha influido mucho en relación con los niños y las niñas son el desarrollo de las nuevas tecnologías, pues hace que se pierda esa voluntad de buscar alguna información en las bibliotecas, haciendo usos de los libros, es tan fácil como introducir lo que buscas en Google y ya te aparecerá toda la información que necesitas. Por lo tanto, como futuros docentes hay que enseñarles el valor que tienen los libros y no solo de la información que posee, si no de los numerosos beneficios que te da un libro en tu vida.
Finalmente, haciendo alusión a la última frase del poema de este post, confirmo que estoy totalmente de acuerdo, ya que como personas debemos fomentar el desarrollo de la fuerza espiritual, convirtiéndonos en mejores personas para tener una mejor sociedad, y que nadie ni nada nos hagan cambiar nuestro camino, tomando las decisiones oportunas y adecuadas.
Jiaxing Zheng. Estudiante de Magisterio de Educación Primaria (3º).
No es ninguna novedad que en pleno siglo XXI las nuevas tecnologías tienen un gran peso en la sociedad. Pero, ¿y esto que sucede es negativo? Realmente no pienso que sea así, de sobra se reflejan los múltiples beneficios y mejoras que aportan en la actualidad. Lo problemático del asunto se genera cuando se traslada a un punto extremista.
ResponderEliminarAdentrándonos en el post, el cual relata una triste realidad que da mucho qué pensar. Refleja la apatía de la juventud hacia una herramienta esencial como serían los libros, en contra posición, los niños y las niñas de países sin recursos valoran, y muchos de ellos desean las oportunidades de los menores de las sociedades más desarrolladas.
Entonces, teniendo en cuenta todo lo anterior, a mi cabeza se viene una pregunta ¿por qué? Y es que no considero que el único responsable de esto sean las nuevas tecnologías, sino también parte de la educación. Porque es cierto que hoy en día un menor tiene antes acceso a un dispositivo que a un libro. Entonces, esto me lleva a pensar que aquellas personas con menos recursos, realmente son conscientes del prestigio y el privilegio que es dotarse de un libro, y a su vez de cultura y conocimiento.
Desde la escuela se trata de hacer que los niños y las niñas se encanten por estos útiles, enseñarles que a través de un libro pueden aprender y sentir, que es mucho más que páginas y palabras, en definitiva se trata de que ellos y ellas le encuentren su punto personal. Y es que para muchos los libros tienen connotaciones negativas, pensar que se trata de algo aburrido sería un ejemplo de ello. Con lo cual, como docentes hay que intentar cambiar la visión de estos niños, y por medio de la motivación, no de la obligación.
Está claro que para poder conseguirlo, hay que llevar a cabo un trabajo de todos no solo desde la escuela. Se trataría de un compromiso de educar a las familias también, y es que de nada sirve predicar si no hay un modelo desde los hogares.
Carla Rojas de León.
Tras leer este post, me he dado cuenta de que Malala Yousafzai con la frase “Un niño, un profesor, un libro y un lápiz pueden cambiar el mundo” tiene muchísima razón, pues considero que una buena educación transforma la vida de los niños y niñas.
ResponderEliminarLa mayoría de personas que vivimos en las sociedades más avanzadas, no somos conscientes del privilegio que tenemos, debido a que no todas las personas que conforman el mundo pueden disfrutar de una buena educación, motivó que veo mal pues, como dice la ONU, la educación es un derecho que poseemos todos los ciudadanos y que debemos disfrutar.
Además, no somos conscientes de la importancia que es tener un libro, pues es un recurso educativo fundamental que permite a los niños y niñas nutrirse de conocimiento y cultura para entender el mundo que les rodea. Asimismo, un simple libro puede ayudar a los niños y niñas a conocerse más, pues descubrirán qué les interesa y que no.
Es por ello que, también considero que es importante una educación espiritual, en la que el niño o la niña se conozca y adquiera la suficiente confianza en sí mismo para que consiga las herramientas necesarias que les permitirán convivir, de forma adecuada, con las demás personas. Un ejemplo, de la importancia que es tener una educación espiritual, es Malala pues pese a que de chiquita no tenía las condiciones como para disfrutar de una educación, con su empeño en querer estudiar, ha llegado a convertirse en una referente para gran parte del mundo.
Kataiza Álvarez González
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ResponderEliminarA través de este post nos introducimos en la idea de la importancia de la lectura. Actualmente, esta herramienta ha sido reemplazada en gran parte por la tecnología, y entonces me planteo ¿este avance tecnológico son todos ventajas? y la realidad es que no. Las nuevas tecnologías nos han facilitado el trabajo en gran medida, incluso nos permiten hacer cosas que antes no nos hubiésemos planteado. Pero por otro lado, los niños han pasado de ocupar su tiempo libre en pasar tiempo con amigos, jugar con juegos de mesa, o en leer un libro, a estar horas y horas enganchados a una pantalla. Hemos pasado de pedir por navidad un libro a pedir una tablet.
ResponderEliminarHemos perdido el valor de las pequeñas cosas, porque como se comenta en el post, entre el alumnado más desfavorecido escasean los libros, es decir, sólo cuando tienes poco es cuando le das el valor a ese poco. Un libro es la fuente de entretenimiento de este alumnado, pero eso no es todo, nutre su fuerza espiritual; les permite romper barreras gracias a su imaginación, potenciar su cultura, ejercitar la memoria, aprender sobre el vocabulario y la ortografía, aumentar su inteligencia emocional, y una larga lista de etcétera. Es por ello que un libro no es sólo un libro, un libro es una herramienta.
Una herramienta que como se comenta en el post, nos permite ser los amos de nuestro destino y los capitanes de nuestra alma. Actualmente los niños desconocen el valor de la lectura porque están creciendo en una sociedad en la que no se prioriza dicha herramienta, pero ahí es donde debe entrar el sistema educativo y la familia. Debemos inculcar en el alumnado la lectura; de esta manera estaremos inculcando múltiples beneficios, además de los comentados anteriormente, el poder de saber, el poder de cambiar las cosas.
Tras haber leído este post, me doy cuenta de que la educación no se valora por igual en todo el mundo, ya que los niños y niñas de los países subdesarrollados desean aprender y agradecen el hecho de tener un libro, mientras que la mayoría de las personas del primer mundo no somos conscientes de todo aquello que tenemos a nuestro alcance.
ResponderEliminarHoy en día, con el avance de las tecnologías, olvidamos la importancia de la lectura, ya que esta permite que las personas desarrollen habilidades de pensamiento, análisis, síntesis y reflexión. Además, considero que cuanto más lees, más satisfechos estás, puesto que te enriqueces como persona. Por esta razón, los y las docentes deberían transmitir al alumnado que los libros son el presente y el futuro de la sociedad. Además, deben promover que la lectura es una herramienta necesaria que te permite adquirir nuevos conocimientos y que las nuevas tecnologías deben funcionar como una herramienta útil que acompañe a la enseñanza, pero que no la entorpezca. Para que esto suceda, hay que realizar un gran trabajo entre todos, no solo desde la escuela, sino también por parte de las familias y de esta forma los niños y niñas tengan un modelo a seguir desde los hogares y no solo en la escuela.
Por último, como bien indica el poema de William Ernest Henley citado en este post seremos capaces de “ser amos de sus destinos y capitanes de sus almas”, porque somos nosotros mismos quienes tendremos que usar este deseo para convertirnos en mejores personas y tomar conciencia de la visión que tenemos acerca de los libros, también tendremos la oportunidad de cambiar de opinión, desarrollando así nuestros propios pensamientos sobre cualquier tema, convirtiéndonos en los dueños de nuestras vidas, para que nadie pueda manipular nuestro propio camino.
Sara de la Cruz Ramón.
Leer este post ha hecho que me de cuenta de que la educación no tiene el mismo valor dependiendo de la clase social que hablemos.
EliminarLos niños que tienen la posibilidad de estudiar evitan hacerlo, en cambio los niños que tienen más complicada la acción de ir a un colegio y aprender, esto es lo que más desean, pues les garantiza un mejor futuro tanto para ellos como para sus familias, económicamente y moralmente.
Estoy de acuerdo con que los niños que tienen una vida más acomodada no aprecian tanto las cosas. Sin embargo, considero que el hecho de que los niños sean exigentes y caprichosos es una cuestión de educación por parte de las familias.
Por último, me gustaría hablar sobre el cierre del poema: “Soy el amo de mi destino, soy el capitán de mi alma”. Pienso que esa es la clave, pues leer y aprender cosas nuevas harán que cada día seas más independiente y así enfrentarte a la vida desde otra perspectiva.
Andrea de León Ramírez
La educación es un derecho básico y esencial que todo el mundo debe poseer, sin embargo no todo el mundo puede adquirirlo de la misma forma, es por ello que la educación y la economía son conceptos que están interrelacionados, pues es un hecho que la educación puede variar en base al nivel económico del país. De ello deriva también, la importancia que se le da a la misma y a los libros en ella.
ResponderEliminarEn los países desarrollados en el que los libros siempre han sido un recurso de fácil acceso, estos pierden su valor, pues al ser un bien que tenemos a mano no lo apreciamos y valoramos tanto. En cambio, en los países subdesarrollados en donde no existen tantos recursos y en donde el libro es un recurso de difícil acceso, se dota a estos el valor que se merecen. Es aquí el momento en el que nos damos cuenta de que las personas “del primer mundo ”no valoramos ni apreciamos los privilegios que tenemos y de los cuales disfrutamos, perdiendo el valor de las pequeñas cosas.
Por último, me gustaría destacar la última frase del poema: “Soy el amo de mi destino, soy el capitán de mi alma” pues hace referencia a que eres tú quien decide y elige tu camino. Las circunstancias pueden presentar obstáculos, pero está en ti decidir cómo lidiar con ellas, esquivarlas y superarlas.
Ainoa Dóniz Fernández.
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ResponderEliminarPara comenzar, haremos hincapié en el título del texto: "Un niño, un profesor, un libro y un lápiz pueden cambiar el mundo". Esta frase nos ilustra una idea acerca de la educación en los niños y la importancia que esta tiene para ellos, además de la necesidad de ser educados desde pequeños para crecer como buenos ciudadanos.
ResponderEliminarHoy en día existe un gran problema, el cual es el mundo tan digitalizado en el que nos encontramos, lo que produce un gran desinterés en las personas hacia los libros tradicionales. Este olvido de la lectura trae consigo muchos problemas, como es poseer un vocabulario muy escaso, problemas a la hora de expresarnos, tener menor imaginación, etc. No podemos vivir pegados a una pantalla y olvidarnos del exterior, de la importancia que tiene un libro de texto o un simple bolígrafo, por lo que pienso que es hora de despertar y darnos cuenta de lo que esto supone en la sociedad actual y saber actuar ante ello.
Por otra parte, es necesario mencionar el tema de la injusticia que existe a la hora de nutrirnos de una buena educación, donde existen países poco desarrollados y con menor capacidad económica donde es más complicado recibir una justa educación. En España todo el mundo puede acceder a una educación gratuita, por lo que debemos de ser conscientes de ello y aprovechar al máximo estos beneficios que nos puede ofrecer.
Como conclusión, puedo destacar la importancia que tienen los medios digitales y las nuevas tecnologías en la enseñanza, a la hora de impartir una clase nos lo hace más ameno y didáctico, pero pienso que no podemos dejar de lado lo tradicional, ya que son herramientas muy útiles y necesarias para una buena educación.
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ResponderEliminarMe gustaría comenzar este comentario con la siguiente oración que aparece citada al comienzo del texto: “los extremistas han demostrado qué es lo que más temen: a una niña con un libro”. Creo que estas palabras reflejan a la perfección la capacidad que tienen los libros para que, a través de su lectura, ampliemos nuestra visión del mundo, ejercitemos nuestro cerebro y desarrollemos muchas opiniones.
ResponderEliminarSin embargo, a día de hoy las nuevas tecnologías han conseguido que esta acción de nutrirnos de la información de los textos y todo lo que esto conlleva, disminuya hasta el punto de casi desaparecer. En nuestra sociedad la mayoría de las personas, tanto niños/as como adultos/as, prefieren invertir su tiempo libre en ver la televisión, conectarse a redes sociales, jugar con el ordenador, etc.
La realidad es triste y decepcionante, y para transformarla el primer paso es tomar conciencia de lo que está pasando, creo que ahí es donde debemos entrar nosotros y nosotras como docentes.
Cierto es que la familia es la principal responsable de los hábitos de los niños y niñas, sin embargo, los y las docentes también tenemos una responsabilidad muy importante. Con esta problemática que estamos viviendo de la sustitución de los libros por las tecnologías, es necesario que en nuestro ámbito contribuyamos a que esto no siga adelante, o al menos no en esta medida. Con esto no me refiero a que simplemente mandemos a nuestro alumnado leer una serie de libros obligatorios, como muchas veces nos ha pasado, sino a que nos preocupemos por concienciar a los niños y niñas de la situación que vivimos y de la suerte y el privilegio que tenemos de disponer de estas fuentes de información.
En conclusión, pienso que el primer paso para lograr un cambio en la sociedad es realizarlo en nuestro día a día y, a partir de ello aprovechar la influencia, por llamarlo de alguna manera, que podemos llegar a tener como docentes, para sensibilizar al alumnado sobre esto mismo, y conseguir que no pierdan su imaginación, su creatividad ni sus habilidades de pensamiento y reflexión, así como el nutrirse de información para formar su propio criterio.
Lucía Vidal Carballeira.
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ResponderEliminarAl terminar de leer el post no pude sacarme de la cabeza la frase "un buen libro es una joya que puede servir de alimento espiritual", pues si bien es cierto que en la actualidad no se le da el reconocimiento ni el aprecio que le acontece a la lectura, bajo mi experiencia un libro es la herramienta perfecta para la mente y el alma. Leer es totalmente necesario para despertar nuestra mentalidad crítica, hacer volar la imaginación y reforzar nuestra red de conocimientos de calidad. Como futuros docentes con "pequeñas personas" a nuestro cargo, debemos alimentarlas con la sabiduría necesaria para que se conviertan en "grandes personas", y no hay muchas mejores opciones que un libro que les haga soñar, divagar, culturizarse, aprender y esforzarse para llegar a ser, entre otros, competentes, responsables, autónomos, admirables y de valor social. Esa es la obligación del que elije presentarse cómo guía de alumnas y alumnos, y para ello debemos otorgarles la posibilidad de un nuevo mundo, debemos otorgar la cultura de la lectura, pero sin prohibirles otras. Es decir, el hecho de que las nuevas tecnologías hayan menguado la lectura no quiere decir que debamos martirizarlas y prohibirlas, ni mucho menos, pues con estas se nos abre un mundo infinito de información que, si sabemos discernir cual es verdaderamente legítima y buena para nosotros, podemos usar a nuestro favor. Bajo esta premisa, debemos valorar también la convivencia de ambos, libros y medios digitales, mostrando a los más pequeños tanto las ventajas como las desventajas de cada uno.
ResponderEliminarEs un texto que nos permite valorar el poder de la educación y de la lectura propia, únicamente por amor a ella. Si se logra amar la lectura, y disfrutar de ella conoceremos innumerables beneficios para nosotros mismos. Sin embargo, es un hábito que se ha perdido en las nuevas generaciones, en nuestra sociedad ésta pérdida está relacionado directamente con las nuevas tecnologías y la variabilidad de estímulos que provocan. Por otro lado, vemos como en otro tipo de sociedad, como puede ser el primer mundo, valoran esto, lo cuidan y perduran.
ResponderEliminarEl ejemplo perfecto es el de Nelson Mandela, aunque no está estrictamente relacionado con la lectura, sí con la escritura. Él, y probablemente cualquiera, que viva una situación de injusticia de tal magnitud como la que vivió necesita expresar, a nivel espiritual lo que siente. Dando como resultado ese precioso poema. Por lo tanto, la escritura, la lectura, o el arte en general, florece siempre en situaciones precarias, algo que desde nuestra perspectiva de la vida es difícil que logremos valorar completamente.
Sergio izquierdo Díaz
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ResponderEliminar“Soy el amo de mi destino, soy el capitán de mi alma”. La educación nos permite justamente eso; ser dueños de nuestra vida, de nuestro destino. Personas como Malala no tienen, ni de lejos, la facilidad que tenemos en Europa para acceder a la educación o simplemente a un libro. Sin embargo, nosotros que sí la tenemos, vemos ir a la escuela como una obligación.
ResponderEliminarLa incesante digitalización que está experimentando la sociedad dificulta que se dé el interés hacia los libros y el saber. Actualmente, la mayoría de niños y niñas preferirían jugar a un videojuego antes que leer un libro.
La escuela es en parte responsable de esto, pero quien tiene el papel fundamental considero que son las familias. Si un niño ve a sus familiares constantemente usando el móvil, el ordenador, la tele… y rara vez (si se da el caso) les ve con un libro, ¿cómo va a interesarse por la lectura? Hay que ser consciente de que los padres, madres y demás familiares son el modelo a seguir.
No obstante, los maestros y maestras también sirven de ejemplo al alumnado y tienen un papel y un reto muy importante frente a niños y niñas que, muy posiblemente, no leen de manera habitual e incluso algunos puede que nunca hayan leído un libro. Pero es su deber sembrar el interés en cada niño. Porque sí: “Un niño, un profesor, un libro y un lápiz pueden cambiar el mundo”.
La educación y la adquisición de conocimientos que la humanidad ha extraído de los libros a lo largo de la historia ha hecho que hoy en día podamos gozar de muchas ventajas y beneficios que no hubieran sido posibles disfrutar si alguien no los hubiera leído en primer lugar.
ResponderEliminarBajo mi punto de vista, es triste que en los países subdesarrollados se valore más la educación que en países desarrollados, puesto que los niños y niñas de hoy en día, como bien dice en este post, no valoran lo que es formarse de una manera adecuada y en un ambiente tranquilo. El nombre del post lo explica bien, ''Un niño, un profesor, un libro y un lápiz pueden cambiar el mundo'', y solo hay que ver el ejemplo de Malala para corroborar todo esto. Esta niña, presa del extremismo y la intolerancia, hizo ver que el poder espiritual que conlleva el libro puede aterrar a los extremistas que se negaban a que ella tuviera una educación propia y digna.
Pero esto no todo recae sobre el alumnado y sobre el poder de los libros en la escuela, ya que de nada sirve si no hay un maestro o una maestra para guiar ese aprendizaje y motivar esa educación. Nosotros, como futuros docentes, tenemos que hacer ver la importancia que tiene la lectura, como se puede encontrar una ''gran fuerza espiritual'' a través de los libros como lo hacía Malala, y sobre todo, hacer que el alumnado sea consciente del tipo de educación que están recibiendo y que, aunque sea un derecho humano, no todos gozan de él.
Además de los maestros y maestras del alumnado, las familias juegan un rol importante en la educación de los niños y niñas, puesto que con seis horas diarias durante cinco días a la semana no es suficiente para reforzar ese hábito lector si no se tiene el apoyo desde las casas del alumnado.
En conclusión, la educación es una tarea de todos, no solo del alumnado y del maestro, sino también de las familias, del entorno y de los altos cargos de los gobiernos. Y todos tenemos que entender el poder que puede tener un libro para cambiar las vidas del alumnado, o como lo hizo Malala, para movilizar países enteros y cambiar el mundo.
Este post corrobora y verifica lo que nadie quiere admitir y es que la sociedad avanzada es totalmente egoísta. Resulta increíble que mucha gente y me incluyo nos creamos el centro del universo siendo desagradecidos con todo lo que tenemos. Existen lugares en el planeta como en el que se encuentra la autora del texto donde ni siquiera pueden salir muchos a la calle con la seguridad de volver a sus casas o sencillamente sobreviven en las calles y ni siquiera tienen una educación básica. En relación a esto, quienes pueden acceder resulta casi un privilegio y cuando lo consiguen se sienten muy afortunados de poder aprender aunque sea lo más básico. Resulta irónico que nosotros nos quejemos de la educación que aunque podría ser mejor el sistema educativo es gratis en su mayor parte y todavía no sabemos apreciarlo. Por otro lado, el texto habla de como mediante un libro una persona es capaz de cambiar el mundo ya que el conocimiento provoca un cambio en la persona porque nos permite poder comunicarnos y el habla es un arma que si se usa bien puede llegar a ser muy peligrosa para aquellos que no quieren escuchar.
ResponderEliminarA lo largo del texto se reflexiona sobre el valor de los libros en la educación y la importancia de nutrir la fortaleza espiritual en los niños. El autor destaca el contraste entre el aprecio por los libros en los países llamados del primer mundo y en otros lugares donde los libros son más escasos y señala que los estudiantes de las sociedades avanzadas a menudo dan por sentados los libros y no aprecian los mensajes que estos albergan . El autor enfatiza el papel de los educadores para ayudar a los estudiantes a desarrollar su fuerza espiritual, ya que les proporcionará la resiliencia y el coraje que necesitan para superar los desafíos de la vida.
ResponderEliminarEl autor cita la historia de Nelson Mandela y su confianza en el poema "Invictus" para superar su encarcelamiento de 40 años como un ejemplo del poder de la lectura. El mensaje del poema de ser el amo del propio destino y el capitán de la propia alma resuena con la creencia del autor de que es importante fomentar la fortaleza espiritual en los niños para ayudarlos a enfrentar los desafíos de la vida. Tras leer esto recordé un fragmento del poeta Alfred Tennyson del poema "ULYSES" que dice:
…Aunque ya no tengamos aquella fuerza
que antaño removía
cielo y tierra, seguimos siendo lo que somos:
el mismo temple en nuestros heroicos corazones
debilitados por el tiempo y el destino
pero con la firme voluntad de pelear,
de buscar, de encontrar, y de nunca rendirse…
Que guarda un mensaje parecido, el de tener valor y luchar por los sueños a pesar de las dificultades.
En mi opinión personal, el texto presenta una visión positiva del valor de los libros en la educación y la importancia de estos para fomentar la fortaleza espiritual en los niños. El autor argumenta que estas cosas son esenciales para que los niños se conviertan en dueños de sus propios destinos y tengan el coraje y la resiliencia para enfrentar los desafíos de la vida.
Héctor Fariña Pérez.
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ResponderEliminarEste texto, deja entrever en sus líneas la clara postura de la sociedad ante las cosas y los recursos de los que dispone, algo que se ha vuelto realmente insignificante y de un valor escaso. Desde el punto de vista de la educación, un libro puede ser la diferencia entre un niño que crece culto, formado y ante todo crítico respecto a otro niño que no tiene ningún interés por la lectura, es así, por tanto, que se tiene que empezar a incentivar en los más pequeños hábitos de lectura y asignar en las aulas un tiempo específico para este ocio tan gratificante y entretenido.
ResponderEliminarPor otro lado, y comentando el poema de William Ernest probablemente dicho poema haya llenado de optimismo a Nelson Mandela durante ese tiempo que estuvo en la cárcel. Realmente, es curioso como un recurso tan básico y corto en palabras (no así tanto en mensaje) puede hacer una diferencia tan grande para otro individuo que lo pueda llegar a leer.
El post refleja una realidad que personalmente fue muy tangible durante mis prácticas. En ellas, dedicamos gran parte del tiempo libre entre clases a buscar una lectura que fuese del agrado del alumnado para trabajar en clase. Tanto la tutora como yo nos frustramos bastante al ver el nivel de los libros que se despacha, y al tener que descartar obras de autores de referencia, por ser complejas para la clase. Al final optamos por una obra infantil de una editorial genérica para niños, que en sí no tiene por qué estar mal, pero en mi opinión, forzar una lectura a todo el alumnado difícilmente va a enganchar con sus gustos o centros de interés y conseguir el efecto de que aprecien la lectura como fuente de conocimientos. Aunque es patente que a día de hoy el alumnado de primaria no tiene tanto interés por las obras escritas, esto no es una norma general, y en mi opinión, el menor ratio de las clases a día de hoy podría permitir que los docentes se planteasen mandar otro tipo de tareas para que el alumnado realmente valore la lectura, como podría ser que éstos pudiesen elegir obras de su agrado, que luego por ejemplo tuviesen que exponer de forma clara al resto de la clase, por poner un ejemplo de cómo podría enganchar esta tarea con otras competencias. Además, esto permitiría adaptar las exigencias de la tarea al nivel del alumnado, pues aunque sin duda habrá alumnos que prefieran exponer una novela infantil o juvenil, también habrá casos en los que el nivel o incluso centro de interés del alumnado justifique que el docente permita que también se expongan obras de formato más sencillo como fábulas, cuentos, o incluso en algún caso, cómics. Aunque todo esto milagrosamente no vaya a producir que la juventud del mundo recupere el interés por los libros, sí que opino que hoy en día se pueden probar diferentes métodos a introducir el mismo libro con calzador a la totalidad de una clase.
ResponderEliminarEl texto habla de primera mano sobre la importancia de los libros y las lecturas en la educación desde los alumnos más jóvenes hasta los más adultos.
ResponderEliminarCon este punto de vista presentado, solo se evoca a pensar en que los privilegios que se nos han proporcionado como habitantes del primer mundo, con todas las oportunidades y comodidades para disfrutar de una vida tecnológica y en como todas estas "ventajas" nos llevan a olvidar la importancia de algunos de los métodos analógicos más importantes que nos han llevado al éxito desde incluso antes del nacimiento de Cristo con la escritura en tablillas o hasta los propios 1440s con la creación del primer libro por la imprenta.
Muchas veces no somos conscientes de la suerte y de los privilegios que tenemos hasta que leemos las realidades de otras personas. Algo tan sencillo como para nosotros puede ser un libro, o a veces algo tan "tedioso" o "aburrido" como para algunos niños es ir al cole, para otras personas que viven en la otra punta del planeta, es un sueño a cumplir.
ResponderEliminarEs importante hacer saber al alumnado de la suerte que tienen por el simple hecho de poder ir al colegio y tener una educación digna, pues muchas veces no valoran que poder ir de lunes a viernes a un centro, realmente es un gran privilegio.
De la misma manera, como docentes deberíamos saber compaginar las nuevas tecnologías, que muchas veces son muy utiles y didácticos, con métodos y estrategias más tradicionales, sin olvidarnos de la importancia y las ventajas que tienen y proporcionan al alumnado, por ejemplo, los libros de lectura. Ya que muchas veces nos dejamos absorver por los nuevos avances tecnologicos y nos olvidamos de cosas tan sencillas y útiles como lo son los libros.
Tras haber leído este post puedo llegar a la conclusión de que cuantos más privilegios tenemos, menos los valoramos.
ResponderEliminarNos encontramos en una sociedad que no es consciente del valor que tiene tener acceso a un libro o a la educación en sí, sin tener en cuenta que años atrás el tener acceso a ello era todo un privilegio, las tecnologías nos han alejado de todo aquello que debe ser necesario en nuestras vidas, como es la adquisición de nuevos conocimientos.
Esto nos hace plantearnos si realmente lo ligados que nos encontramos, por ejemplo, al mundo de internet, nos beneficia realmente, ya que de una forma u otra nos está alejando de lo que es realmente importante.
Debemos de ser capaces de dar un paso adelante y decidir por nosotros mismos cual queremos que sea el rumbo de nuestro aprendizaje y no dejarnos llevar por lo que dicta la sociedad, por lo tanto debemos atender a la frase que vemos en lo que hemos leído: “soy el amo de mi destino, soy el capitán de mi alma”.
El escrito nos muestra y nos hace reflexionar sobre el estilo de vida que lleva la sociedad en la que nos encontramos y la cual compartimos, lo que nos hace a todos/as responsables por igual de lo que ocurre en ella.
ResponderEliminarUna de las cosas más tristes que pueden existir es no valorar lo que se tiene pero querer algo que está lejos de nuestras manos. Por ejemplo, en los países con más pobreza, los niños y niñas desean tener algo tan simple como un libro, y en donde tienen todos los libros que quieran, no los valoran, no son conscientes del enriquecimiento que les puede producir un simple libro. Esto se debe a la baja educación y valoración que existe en nuestra sociedad, algo que tiene que cambiar de manera urgente.
Tras haber leído este “post” lo que me impacta principalmente son los extremistas, temerle a una niña con un libro es sobrenatural, la persona que se nutra de los conocimientos de la educación tiene un futuro de ideas impresionantes.
ResponderEliminarA nivel mundial tenemos los dos polos opuestos, alumnado que tiene la suerte de tener un libro y ampliar sus saberes, puede servirle de “alimento espiritual”, y luego tenemos al alumnado que por desgracia no tiene la posibilidad de saber lo que es un libro. En la actualidad, ya muchos centros educativos, no utilizan lo que es un libro, sino lo dejan todo en el mundo digital, cuando necesitas información sobre algo, buscas directamente la solución en internet, ya no saben lo que es tener un libro delante y buscar hasta encontrar la solución.
Si nos centramos en lo que es un libro, podemos ver que se define como “conjunto de muchas hojas de papel u otro material semejante que, encuadernas, forman un volumen”. Pero, ¿qué hay en esas hojas? Los conocimientos que hacen que tu mente se amplíe a nuevos contenidos que desde otro punto de vista nunca hubieses apreciado, ha poder hablar y escribir de forma correcta, y dejar las palabras vulgares a un lado. Pero, ¿y qué es el volumen de un libro? El “alimento” que nutre nuestro cerebro.
Ainoa Gutiérrez Afonso
En mi opinión, estoy completamente de acuerdo con el punto de vista acerca de la importancia que se le da en los países primer mundistas a los libros de texto, los cuales han pasado a un segundo plano siendo sustituidos por sus propias versiones digitales y demás herramientas digitales las cuales han relegado a los libros a un segundo plano.
ResponderEliminarEs totalmente cierto que los libros físicos cumplen un papel fundamental en la enseñanza de los aspectos más básicos de las competencias lingüísticas como lo son la lectura, la comprensión lectora, la expresión escrita, etc.
Bajo mi punto de vista me parece importantísimo que en las edades más tempranas, los niños/as aprendan utilizando herramientas no digitales, pues para nuestro cerebro resulta más cómodo y fácil de entender cuando leemos en una hoja de papel y no ante una pantalla. Pero se ha de tener en cuenta que los tiempos cambian y nuevas adaptaciones surgen con las nuevas generaciones, el abandono al material físico como los libros, no es causa de los problemas actuales, sino más bien una consecuencia que estamos viviendo actualmente y podemos achacar dicho comportamiento a las demandas tanto de nuestro día a día como las del mundo laboral, donde se exigen y necesitan otras competencias distintas a las de antaño.
Este post nos hace reflexionar sobre múltiples aspectos, como el riguroso reemplazo de los libros por las tecnologías, el poco afán de los niños y niñas por el hábito de lectura y la diferencia de valor que se le da a la educación en los países desarrollados y subdesarrollados.
ResponderEliminarHoy en día, ese declive de la lectura es, en cierta medida, consecuencia de todos esos aparatos electrónicos que han provocado el desinterés por leer libros de cualquier género o, incluso, la poca necesidad de buscar información en enciclopedias de una biblioteca. No obstante, también es cierto que hay que hacer uso de todas estas facilidades que nos han aportado las nuevas tecnologías, así como es importante la constante actualización, no solo de los docentes, sino de todas las personas en cuanto al beneficio de estas. Pero ello no justifica esta decadencia de los hábitos de lectura.
Es curioso y, al mismo tiempo, denota tristeza el hecho de que estas herramientas fundamentales son sumamente apreciadas por aquellos niños y niñas procedentes de países sin recursos y en vías de desarrollo. Mientras que, por el contrario, aquellos y aquellas que viven en países desarrollados no le dan esa trascendencia y ese valor a los libros.
Aun así, me voy a quedar con esa frase del poema “Invictus”, que dice “Soy el amo de mi destino, soy el capitán de mi alma”, pues si bien es cierto que todos estos aspectos comentados pueden acarrear esa imposibilidad de que los niños y niñas sean capaces de alimentar su fuerza espiritual, la frase de Malala Yousafzai nos puede mostrar esperanza, optimismo y la prevención de esa imposibilidad, pues “un niño, un profesor, un libro y un lápiz pueden cambiar el mundo”.
Christian Adrián Delgado Leandro
Este articulo retrata a la sociedad del primer mundo, ya que desde nuestra posición de privilegiados tenemos acceso a numerosos lujos y herramientas y más aún con la aparición de internet , la cual nos facilita acceder a infinitas fuentes de información tales como libros online, post … con simplemente hacer clic en un enlace.
ResponderEliminarEl problema de tener todo a nuestro alcance con tanta facilidad es que no valoramos realmente lo que tenemos y esto contrasta con la dura realidad que están viviendo las personas que pertenecen a países subdesarrollados los cuales tiene grandes dificultades para tener acceso a un simple libro de lectura.
Por otro lado, cabe destacar que se esta perdiendo la costumbre de disfrutar de los libros y aprender mucho de ellos , además de que es una herramienta que esta perdiendo mucho protagonismo no solo en las clases sino también en la vida cotidiana provocado seguramente por el auge de internet, como dije ya anteriormente.
En definitiva creo que deberíamos volver un poco a los orígenes de la educación para combatir esta situación que estamos viviendo.
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ResponderEliminarEsta publicación resalta la necesidad de que la formación académica se conciba como una herramienta que pueda permitir a la ciudadanía desarrollarse de manera integral, por medio de la adquisición de saberes de una variedad de campos del conocimiento, las competencias fundamentales para llevar a cabo la aplicación de los contenidos impartidos y, sobre todo, la inclusión de las actitudes necesarias con el fin de afrontar los principales desafíos de la sociedad moderna.
ResponderEliminarTal y como lo expresa en el título a la entrada de este blog, para poder cambiar la percepción que tenemos con respecto a la problemática de la educación en la actualidad, se debe atender a los ejes principales: el alumnado, el cuerpo docente, los materiales didácticos y las técnicas o estrategias que mejoran los procesos de enseñanza-aprendizaje en todos los niveles, atendiendo a los diferentes puntos de vista de la realidad educativa.
El texto comenta que la existencia de las desigualdades socioeconómicas y culturales ha agrandado la brecha académica entre regiones, al ver que sus comunidades no han atendido de manera adecuada las necesidades formativas a lo largo de los primeros años de escolarización.
Sin embargo, en los últimos años la sociedad ha tenido que enfrentarse a un fenómeno adverso: la presencia del analfabetismo funcional en las generaciones poblacionales más recientes y la preocupante escalada de corrientes extremistas y fundamentadas en la ignorancia de la gente hacia ciertas temáticas, así como la manifestación del pensamiento dicotómico y la ausencia de referentes de autoridad en las diferentes disciplinas en los medios de comunicación de masas.
En este sentido, la lectoescritura se considera un canal comunicativo imprescindible, dada la capacidad para transformar la información transmitida en conocimiento, a través de la consulta bibliográfica y la creación de contenido. De esta manera, la ciudadanía puede expresar opiniones sin poner en riesgo su reputación, valorando críticamente sus postulados y extrayendo conclusiones basadas en la evidencia para establecer posibles alternativas al conflicto planteado.
A modo de resumen, hace falta que los sistemas educativos introduzcan planes de acción para que podamos abordar la educación como un enfoque holístico y procesual, en lugar de uno de carácter jerárquico y en relación a un conjunto de resultados. Esto ayudará a que la formación académica sea un deber, un entorno de inclusión social y un derecho que no puede ser alienado por la resistencia a los cambios en un entorno donde la volatilidad, la incertidumbre, la complejidad y la ambigüedad son las constantes que controlan cada movimiento efectuado.
Jovanna Martín Mendoza
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ResponderEliminarA mi parecer, hay que tener una cosa clara, a la gente de poder les conviene que la población sea inculta y lea lo más mínimo posible, para poder gobernar a su manera y sin inconvenientes. Esto se ve reflejado sobre todo en los países tercermundistas donde la educación es algo que muy pocos se pueden permitir, ya sea por cercanía o por inestabilidad económica, etc. Es por esto, por lo que el autor del fragmento de texto comenta que 'no hay nada que los extremistas teman más que una niña con un libro'. Puesto que en las sociedades más avanzadas, casi todos tienen fácil acceso a libros y a la adquisición de conocimiento esencial para no ser estafados por los gobernantes.
ResponderEliminarOtro aspecto a recalcar del texto, es el hecho de que a los jóvenes no les gusten nada los libros. Esto a mi parecer, es consecuencia de una mala gestión en la enseñanza de técnicas de lecturas que sean atractivas y productivas en los alumnos. Todo esto genera que las lecturas de los libros se vuelvan largas y aburridas, produciéndose así un abandono o rechazo hacía la lecturas, ya qué, la mayoría de la gente aplica las mismas técnicas de lecturas usadas durante la etapa de primaria.
Concluyendo, la lectura es esencial y es útil para ayudarte a resolver problemas cotidianos y conseguir así una mayor independencia en tu estilo de vida.
Los países menos desarrollados tienen falta de recursos,
ResponderEliminarcarencias para satisfacer las necesidades educativas.
Por el contrario, en los países desarrollados se tiene el derecho a la educación. Se proporcionan recursos, estrategias didácticas, herramientas pedagógicas que intervienen en el proceso de enseñanza-aprendizaje de los estudiantes y no se valora. La mayoría de las personas no son conscientes de sus privilegios.
Debemos valorar y apreciar los recursos de fácil acceso que tenemos, como son los libros.
“Los libros son las abejas que llevan el polen de una inteligencia a otra”, James Russell.
Tras haber leído y comprendido el texto, llego a la conclusión de que la educación es un recurso básico en la vida de las personas, no sólo en la de los niños/as sino también en la de los adultos.
ResponderEliminarEstá claro que la educación no es la misma en todos los lugares del mundo, y que en muchos sitios no se le da la relevancia que tiene en el crecimiento y evolución de las personas.
Por otro lado, las personas que la tenemos de una manera efectiva y no nos cuesta obtenerla la menospreciamos o simplemente la ignoramos sin pensar las personas que no pueden disfrutarla.
Cabe destacar la frase que aparece en el texto: “ “Soy el amo de mi destino, soy el capitán de mi alma” ya que cada persona debería de elegir la manera en que quiere ser educado para su progreso en todos los ámbitos sin importar lo que digan los demás ni dictado por nadie.
A modo de reflexión, este post relata las verdades que ocurren en la sociedad actual. Además, nos hace replantearnos acerca de la importancia de la educación y de la suerte que la mayoría de nosotros tenemos para poder llevarla a cabo. Por otro lado, nos habla de la poca valoración que le asignamos a la escuela, los libros y el profesorado, especialmente en la sociedad del primer mundo. En cambio, los niños y niñas que han tenido menos suerte en la vida, y, por consiguiente, no disponen de los recursos necesarios para disfrutar de una educación plena, valoran y desean todo lo que nosotros disponemos para aprender nuevos aspectos de la vida. En otras palabras, las sociedades avanzadas no valoran ni disfrutan de algo tan primordial, como es la educación. En mi opinión, la causa reside en que es considerado algo básico y fundamental, algo que tenemos sin gran esfuerzo, aspecto que nos lleva a un desprestigio significativo de ello.
ResponderEliminarPor último, este escrito habla sobre la “fuerza espiritual” y lo necesario que es nutrirla y desarrollarla. Esto es algo fundamental, pero que, según mi criterio, viene acompañado de la familia en la que te has criado. Este es un pilar fundamental, encargado en guiarte en el camino, acompañarte y animarte para desarrollar esa fuerza espiritual de la forma correcta.
Iván Baeza Padilla
Primero quería comenzar esta retroalimentación mostrando mi decepción con el miedo que se le tiene al libro en la actualidad, vivimos en la era de las tecnologías donde parece que si algo no tiene pantalla o teclado no es capaz de transmitirnos la misma información o incluso más que un ordenador o un teléfono móvil. Hoy en día estamos tan acostumbrados a tener en nuestras manos acceso a cualquier cosa que no somos capaces de valorar lo tradicional, como por ejemplo los libros, los poemas, el arte, etc.
ResponderEliminarEn el texto se refiere a la juventud actual como ”niños exigentes y caprichosos, que no saben apreciar lo que tienen”. Muchos niños del primer mundo crecen con todo lo necesario para tener una vida plena, cómoda y de calidad, como puede ser el acceso a sanidad, educación, comida, entretenimiento, deporte, etc.
En cuanto al relato mencionado de Nelson Mandela, me quedo con el último verso de este: “Soy el amo de mi destino, soy el capitán de mi alma.”
Me identifico intensamente con esta frase puesto que siento que muchas veces mi destino ha estado controlado por personas externas a mi o acontecimientos que me han ocurrido en mi vida, es muy necesario saber cómo llevar las riendas de nuestras vidas y saber diseccionarla hacia dónde queremos.
Marcos Mengual de la Rosa
Tras la lectura de este artículo, he podido observar que en la actualidad se ha reemplazado el enriquecernos de información a través de un libro por las tecnologías. En cierta parte, las tecnologías han sido un gran avance para esta sociedad, pero también un gran retraso para las nuevas generaciones, ya que no hay interés en aprender de los libros. Nosotros como docentes debemos actuar para que las nuevas generaciones encuentren interés en leer y nutrirse de nuevos conocimientos a través de la lectura. Es decir debemos fomentar este habito además de saber combinarlo con las tecnologías.
ResponderEliminarPor otro lado, en el post se comenta que los niños/as de hoy en día no valoran las cosas como deberían. Y esto se debe a que se les dan las cosas ¨masticadas¨ y estoy de acuerdo, pero considero que eso también se debe a la educación que recibe cada niño/a en sus casas. Los padres y madres deben tener un rol autoritario pero también entender que hay que ser permisibles y empáticos. Además, para terminar, cabe destacar que es preocupante observar que en un país como este no aprovechemos estas ventajas de aprendizaje ya que en países en peores condiciones si valoran. Por ello estoy totalmente de acuerdo con la frase de ¨En el primer mundo los niños y niña tienen muchas cosas y no saben apreciarlas¨.
María Domingo Izquierdo.
Este post nos hace ver la importancia de la lectura ya que desafortunadamente, hoy en día, la lectura no es valorada.
ResponderEliminarActualmente, vivimos en una sociedad en la que se da muchísima importancia a las nuevas tecnologías y, por lo tanto, hemos perdido el interés por la lectura sin darnos cuenta de que esta nos aporta una serie de beneficios como, por ejemplo, el adquirir nuevos conocimientos.
Es por ello por lo que como futuros docentes debemos intentar cambiar este aspecto en los niños y niñas de manera que volvamos a despertar en ellos ese interés por los libros y todo lo que se puede aprender de ellos.
Por último la frase de "soy el amo de mi destino, soy el capitán de mi alma" de cierta manera nos está animando a que seamos únicamente nosotros quienes tomemos nuestras propias decisiones en base a lo que queremos ser en nuestro futuro sin dar importancia a lo que piensen los demás.
Yadira Guillén Díaz
Tras haber leído este post me doy cuenta como cuantos más privilegios tenemos las personas menos las tenemos en cuenta y le damos valor.
ResponderEliminarMuchas veces no nos damos cuenta o no somos conscientes de la suerte que tenemos como mismamente lo es el hecho de poder poseer un libro ya que nos resulta algo bastante aburrido mientras que para otras personas de la otra parte del mundo le es una fortuna o privilegio ya que no disponen de la misma suerte que nosotros.
Me doy cuenta como muchos niños que tienen la posibilidad de estudiar la evitan porque les resulta un tiempo perdido y por otro lado, otros los cuales tienen prácticamente imposible la posibilidad de asistir al colegio desean hacerlo ya que lo ven con una visión totalmente opuesta a estos niños que sí tienen esa suerte de ir.
Por último, una frase que me llamó la atención es: "Soy el amo de mi destino, soy el capitán de mi alma". Considero que esta frase es la clave para conseguir el cambio en esta sociedad tan dependiente de lo que hagan los demás. Debemos darnos cuenta y ser capaces de dar el paso a cambiar este mundo y ser capaces de decidir por nosotros mismos qué futuro queremos sin importar la opinión de los demás.
Mª Teresa Cabrera Santana
Gabriela Morales Pérez (lo subo desde esta cuenta ya que desde la mía no me permite hacer comentarios)
ResponderEliminarComo dice Joseph Addison: "La lectura es para la mente lo que el ejercicio es para el cuerpo". Esta frase nos hace pensar en la importancia que le damos a nuestra salud y apariencia física, la cual cuidamos con ejercicio y buena alimentación, pero ¿por qué no es así con la mente? ¿por qué no hacemos el mismo esfuerzo por cuidar y nutrir nuestra mente?
Este texto comenta la importancia de la lectura, el mejor hábito para mejorar nuestra mente. La lectura nos hace personas fuertes, como Malala Yusufzai. La sociedad más extremista presenta violencia motivada por creencias y valores -o ideologías- distorsionados hacia este tipo de personas, motivadas por la lectura y la educación, pues como comenta Malala en su libro, y se hace referencia en dicho texto: “los extremistas han demostrado qué es lo que más temen: a una niña con un libro”.
Un libro de texto es un elemento básico para el alumno y para el docente, para el primero facilita y potencia el aprendizaje, para el segundo orienta, delimita y apoya el proceso didáctico. Los libros tienen un papel indispensable en la vida de las personas, pues les introduce en un mundo lleno de imaginación, además de que les proporciona conocimientos, permitiéndoles mejorar sus hábitos de lectura e impulsando sus habilidades de escritura, así como la expresión oral, potenciando además sus capacidades cognitivas de memoria. No se puede dudar de que estos son importantes en la vida de cualquier persona, sobre todo si está estudiando. Los libros pueden ayudarnos a tener un panorama más amplio de la realidad porque son una ventana hacia nuevos horizontes. Es por ello, que en la actualidad hay que potenciar el hábito de la lectura desde el gusto y la pasión, y no la obligación, buscando técnicas y estrategias en las que nosotros, como docentes, demos visibilidad a la importancia de estos complementandolos con las nuevas innovaciones tecnológicas que motivan mucho hoy en día.
En conclusión, un libro está repleto de conocimientos que nos dan lecciones importantes de vida: nos enseñan cómo vencer las dificultades cotidianas, cómo vencer el miedo. Nos enseña sobre el amor, en fin, sobre multitudes de aspectos propios de la vida. Los libros tienen ya muchos siglos, y nos revelan información de nuestro pasado histórico.
SARA DE LA ROSA PÉREZ
ResponderEliminarSi bien es cierto que el alumnado en general le tiene poco aprecio al libro, creo que debemos reflexionar el motivo de ello. No para buscar culpables sino para entender el porque sucede esto, pues claro está que el alumnado no es sino el producto de una sociedad que lleva décadas desarrollándose. Defensora de la idea que ante los problemas hay que poner soluciones, y no pegas. En las sociedades más contemporáneas el acceso a la información es infinito, y el filtro para poder digerirla casi inexistente. ¿Cómo hacer para que los libros, la información, el placer de aprender se conviertan en una realidad? Creo que como futuros docentes estamos ante el desarrollo de personas, y tal como dice el poema de William Ernest Henley, y hasta que ellas mismas sean sus propios capitanes, seremos los futuros docentes aquellos encargados de dar las herramientas y las soluciones para que esto sea una realidad.
No sabemos lo afortunados que somos hasta que perdemos aquello que nos merecíamos por derecho. Es más, estamos acostumbrados a mirar hacia otro lado cuando le arrebatan ese bien preciado a otros, que no viven en las mismas condiciones privilegiadas que nosotros. Por ejemplo, derechos como acceder a la educación tristemente no son universales.
ResponderEliminarPersonas como Malala Yousafzai se encuentran desprotegidas y a merced de gobiernos que no quieren que su pueblo se nutra de algo tan importante como la educación. Creen que los conocimientos les darán poder y esos saberes les pondrán en su contra, algo que sin duda repercute con mayor fuerza en el género femenino. La opción de estudiar ni siquiera existe para ellas, hecho que es intolerable.
“Pero, ¿y qué podemos hacer nosotros ante estas injusticias?”. A veces, intervenir directamente en situaciones problemáticas de esta magnitud es imposible. Sin embargo, como sociedad sí que podemos valorar aún más si cabe todo lo que tenemos a nuestro alcance y apreciar el hecho de residir en un país del primer mundo, dónde la educación es un regalo por nacimiento. Este post no hace más que recalcar este argumento, con el que no puedo estar más de acuerdo.
EliminarNuestra misión como maestros/as es dar a entender a nuestro alumnado que los libros son un presente y un futuro para las siguientes generaciones. Las nuevas tecnologías deben funcionar como una herramienta útil que acompañe a la enseñanza y no la nuble o entorpezca. De ahí que sea tan relevante inculcar el amor por los libros y todo lo que estos nos pueden aportar, sabiendo poner en contexto al alumnado y enseñándole las ventajas de las que dispone comparado con otros niños/as de otros países. Así, podrán “ser amos de sus destinos y capitanes de sus almas”, como bien indica el poema de William Ernest Henley citado en este post, haciendo lo que muchos no pueden por encontrarse oprimidos y valiéndose de estos conocimientos para construir un mundo mejor.